El viernes fue el día más frío del año y cuántas veces hemos oído el sábado o el domingo con el precio de la luz más caro desde que hay registro. También nos ha sonado el lunes más triste del año, el 'Blue Monday' o, hace poco, la ciudad con la mayor iluminación navideña capaz de ser vista desde la Estación Espacial Internacional. La mayor tasa de inflación en los últimos años o, en este momento, la mayor crisis ruso-americana en territorio europeo desde el final de la Guerra Fría.
Bueno, sin querer restar importancia y ajustando el valor de cada uno de los acontecimientos y hechos referidos, imponiéndose lo mayor a lo mejor, este galope a lomos de los superlativos nos deja exhaustos. Y es que mantiene nuestra tensión y fundamentalmente, nuestra atención.