Un atajo… demandista y ofertero, de messías, talentista y ganadero

FARAÓNICO. Perteneciente o relativo a los faraones. Grandioso Fastuoso. Que se sale. DESORBITADO. Como lo que ganan o dejan de ganar los Messias de la actualidad. Reyes del mambo con pelota o sin ella, con micrófono o guitarra, con toga o batín, con pezoneras o bate de beisbol. De cinco en cinco y otro cinco que en millones te repico. Cinco lobitos tiene mi mano, tres un futbolista para no quedarse manco. Dime cuánto crees que vales y te diré que se muere uno antes de ego que por amor. Hablando de amor, el por amor al arte y la vocaciones bien desarrolladas entran en un ranking privilegiado muy lejos de las aspiraciones peatonales. El espectáculo está servido: ¿Un fenómeno del siglo XX?

Orejas en alto al tralarito para los acalorados: Las cifras de ingresos por multas de la Dirección General de Tráfico triplica el sueldo del jugador del Barcelona. Nuestro exceso de velocidad tanto en el discurrir como en el transitar resulta ser la más eficiente de las remuneraciones y por qué no la más faraónica de todas. Eso convierte a los circulantes en los mejores postor de la infracción, impostores de la ganancia

A cada atajo le sigue el camino largo: el de repensar. Escucha la reflexión de Ignacio Varela sobre '¿Por qué ganan lo que ganan los famosos?'.

Los Atajos de Lobo son un ejercicio de agilidad verborrosa y a la vez una reverencia a la sabiduría en la que desembocan. La ferocidad de las palabras construyen el camino más corto jamás transitado por las ondas de Onda Cero.

Los atajos se cogen cada fin de semana en ‘Por Fin No Es Lunes’, con una cesta de ingenuidad a la que se le van añadiendo tarros de ironía, sarcasmo e interrogantes. Entre aullidos rápidos y audaces, Isabel Lobo te acerca sin distracciones al pensamiento crítico y abstracto, la fórmula de los ancestros del bosque para llegar al camino largo de la reflexión.

La sabiduría siempre en guardia en 'Por fin no es lunes'

Los sabios de guardia, Ignacio Varela y Sabino Méndez, reflexionan sobre lo sucede en el mundo, dan la posibilidad de detener el tiempo un momento y hacer algo de autoconciencia en esta época donde los ritmos circadianos están dados la vuelta.

De tralarito en tralarito, se canturrean y deletrean algunas de las incógnitas que, más tarde, despejarán el camino hacia las conclusiones. ¿Cuáles? Las más inesperadas y audaces. Y háganse con una redecilla de abuela, va bien para retener lo que suena, pero no tratar de entenderlo todo a la primera.

Escúchalo siempre que quieras en ondacero.es, no te los pierdas en directo cada sábado y domingo a partir de las 08:40 de la mañana y quédate hasta la última palabra del sabio que suele coincidir con las señales horarias.