Minuto tecnológico: Las fake news son más potentes en Whatsapp

El dueño de Facebook, Mark Zuckerberg, tuvo que dar explicaciones en el propio Senado de los Estados Unidos o ante el Parlamento Europeo. Dijo que pondría todo el esfuerzo y todos los algoritmos para que no volviera a pasar.

Pero se le amontona el trabajo. Un estudio de la Universidad de Oxford ha publicado y alertado sobre el peligro que supone la viralización de noticias falsas también en las aplicaciones de mensajería instantánea. Y la más potente, la más usada por todos es Whatsapp, que pertenece a la propia Facebook. Este estudio, en el que también ha participado la agencia de noticias británica Reuters, indica que hoy por hoy las fake news están más presentes en los grupos de amigos y conversaciones de Whatsapp que incluso en las redes sociales.

Más presentes y más peligrosos. Porque aquí no hay un muro público para denunciar y medir el impacto que causan las fake. No hay vigilantes humanos ni algoritmos matemáticos para luchar contra la información falsa.

Estamos hablando de entornos privados, cerrados donde el concepto virus explota con toda su plenitud. Se viralizan como pandemias imparables. Y son indetectables hasta que no saltan a un medio público o a una red social. El estudio ha revisado casos en Brasil, India o Kenia, donde Whatsapp ha sido el caldo de cultivo de informaciones amarillistas procedentes de grupos antivacuna o de la existencia de falsos asesinos de niños. Mensajes de voz e incluso vídeos manipulados que llegan a través de amigos y familiares, lo que les da un plus de cierta credibilidad.

En España estas fakes ya han llegado. Desde falsas amenazas terroristas a campañas que avisan de secuestros de escolares. Noticias impactantes que apelan al miedo, al odio, al instinto más básico. Más de una vez los perfiles de @policía y @guardiacivil han tenido que desmentir en redes estos mensajes por Whatsapp.

Y la mejor medicina contra estos virus no es otra que la información procedente de marcas periodísticas hecha por profesionales.