El Gobierno y el Comité Nacional de Transporte por Carretera han alcanzado esta madrugada un acuerdo que incluye una rebaja de 20 céntimos por litro en el combustible y ayudas al sector de más de 1.000 millones de euros.
Dicho documento, sin embargo, no está firmado por la Plataforma del Transporte, convocante del paro que se prolonga desde hace once días y que siguen exigiendo que la ministra se reúna con ellos.
Para Edu Madina, "el problema de Plataforma es que no es la representación del conjunto del transporte" y en estas semanas no ha alcanzado su objetivo de ser tratado por el Gobierno como un interlocutor válido durante las negociaciones.
En este contexto, Madina celebra el acuerdo alcanzado con el objetivo de poner fin a los paros de los transportistas; "ojalá las circunstancias de la economía mejoren y no tengamos que ver escenarios de dificultad en un sector tan relevante", sostiene en relación a la escasez de algunos productos en los supermercados.
Tendría habilidad la ministra si fuese capaz de recibirles; son esos gestos políticos los que marcan la diferencia y aplacan las reivindicaciones
Borja Sémper reconoce que las primeras reacciones del Gobierno "no fueron las más inteligentes" desde el punto de vista político "al calificar o poner apellidos a estas movilizaciones". Sin embargo, considera que el pacto es "una muy buena noticia".
Sobre la representación de asociaciones y colectivos ciudadanos, Sémper sostiene que "ha cambiado". Por una parte, está la representación legítima votada por los trabajadores de un sector, pero también hay otros colectivos "en los márgenes".
"Tendría habilidad la ministra si fuese capaz de recibirles; son esos gestos políticos los que marcan la diferencia y aplacan las reivindicaciones", argumenta Sémper.