El consejero de Interior de la Generalitat admite que no se puede garantizar la seguridad total cuando las cosas se tuercen
El consejero de Interior de la Generalitat de Cataluña, Miquel Sàmper, comenta en Más de Uno los altercados violentos del pasado sábado en Barcelona, donde los manifestantes incendiaron una furgoneta de la Guardia Urbana con un agente dentro.
Tras dos semanas de altercados violentos en Barcelona a raíz de las manifestaciones de apoyo a Pablo Hasél y después de que los manifestantes incendiasen una furgoneta de la Guardia Urbanacon un agente en su interior, Carlos Alsina entrevista en Más de Uno a Miquel Sàmper, consejero de Interior de la Generalitat de Cataluña.
Según defiende Sàmper, el aumento de la violencia es algo que llevan denunciando desde hace dos semanas, cuando se produjo el ataque a una comisaría de Vic que acabó destrozada y cuyos agentes tuvieron que refugiarse dentro. "Ahí ya vimos cuál era el grado de violencia", explica el consejero e insiste en que, durante las últimas protestas, se está pasando de realizar daños materiales a daños personales. Después de dos semanas de manifestaciones que acaban con incendios de contenedores y saqueos, el incendio de una furgoneta de la Guardia Urbana con un agente dentro es algo inadmisible: "no puede ser que las manifestaciones tengan este tono de violencia desmedida y desbocada", sostiene.
Separar el derecho a la libre manifestación de la violencia
Miquel Sàmper insiste en la necesidad de separar las manifestaciones pacíficas a favor de la libertad de expresión de los actos violentos. Sin embargo, sentencia: "a los violentos hay que tratarles como tales", y defiende su identificación y detención lo antes posible. Así mismo, el consejero ha comparado estas manifestaciones violentas con los ‘Chalecos amarillos’ de París o el asalto al Capitolio de Estados Unidos para ejemplificar lo complicado que es controlar a miles de personas que comparten un objetivo y admitir que la seguridad no está garantizada cuando la situación se complica.
Reuniones para acabar con la situación
Para garantizar que esta situación acabe, el consejero considera que es necesaria "mucha concienciación social". Por su parte, Sàmper explica que están haciendo "todo lo posible para evitarlo", y esta misma tarde se reunirán con la alcaldesa de Barcelona y el jefe del dispositivo de la policía urbana de Barcelona para "hacer aún más estrecha la colaboración". Así, pretende que haya un aumento de la coordinación y la capacidad de trabajar de forma conjunta entre los diferentes responsables.
"La violencia debe ser condenada por todo el mundo"
En cuanto a la reticencia de partidos como la CUP para condenar estos actos vandálicos, Sàmper sostiene que "la violencia debe ser condenada por todo el mundo" y considera que, en parte, se ha llegado a esta situación porque en un primer momento ha habido mensajes que no eran lo suficientemente claros.