El monólogo de Alsina: Ya nadie alardea de conocer a Urdangarín
Viniendo a Coruña, en el aeropuerto, me he encontrado a Iñaki Urdangarín, iba de incongnito, con una nariz postiza, bigote, gafas oscuras, como el rey, con el cuello de la gabardina hacia arriba, como si fuera un agente secreto, o un principe azul destronado...