La Mírada Cítrica: El atasco en el Canal de Suez que paraliza el 12% del comercio mundial
La Mírada Cítrica de Ignacio Rodríguez Burgos en La Brújula hoy sobre el atasco en el Canal de Suez
Muchos fabricantes, inversores, industriales, comerciantes y transportistas están pendientes del Canal de Suez. Pocas veces se ha organizado un atasco semejante al causado por el embarrancamiento del megabuque Ever Give en la estrecha vía que une el Mediterráneo con el Mar Rojo. Por el Canal de Suez pasa el 12% del comercio mundial y 13 millones de barriles de petróleo al día.
El Canal de Suez se construyó a mediados del siglo XIX por la visión de los ingenieros franceses y la financiación de Gran Bretaña, la máxima interesada para recortar los días de viaje a la India, la corona de su Imperio. Antes del Canal de Suez, cualquier barco, cualquier noticia, tardaba meses en llegar al Indico. Con el canal la cosa se redujo a semanas.
Los faraones hace más de 4 mil años, en el Imperio Antiguo, ya construyeron su propio Canal, que unía el Mar Rojo con el Delta del Nilo a través de los Lagos Amargos. Esta vía marítima ha dado alegrías y amarguras a Egipto. Cuando Nasser lo nacionalizó Francia, Reino Unido e Israel atacaron. Fue la primera vez que lo cerraron, después estuvo clausurado desde la Guerra de los Seis Días hasta 1975. Había que circunnavegar África, lo que encareció las mercancías, provocó el nacimiento de los superpetroleros y benefició a puertos de tránsito como el de Las Palmas de Gran Canaria
Los atascos en Suez y Port Said muestran que en el mundo de la tecnología y el 5G la geografía todavía impone sus reales. Junto a Suez hay otros puntos candentes para el comercio mundial, como el Canal de Panamá, el de la Mancha o los estrechos de Gibraltar, Ormuz, Malaca y Bósforo. Mientras el turismo se atasca en España. Este año tampoco habrá Semana Santa.
A vueltas con las ayudas a Plus Ultra
Lo que se estrecha también es el círculo sobre las ayudas a Plus Ultra. El Gobierno insiste en que la decisión se apoyó en informes independientes y que la empresa cumple los requisitos. Pero entre los informes había uno que provenía de un organismo del Ministerio de Transportes. En cuanto a los requisitos, Plus Ultra no es estratégica, solo tiene un avión, que ayer voló a Caracas; la mayoría del capital es venezolano y algunos de sus accionistas cuentan con intereses en paraísos fiscales. Plus Ultra ha sido agraciada con 53 millones, el resto de las empresas en dificultades tardarán aún semanas en poder acceder a ayudas y eso cuando lo consigan. Como decía el eurodiputado Luis Garicano en este programa, la cosa no huele bien.