El cuaderno de Chapu: "España (coma) puede"
Chapu Apaolaza comenta las notas del final del verano que siempre es el comienzo de algo.
Traigo las notas del final del verano que siempre es el comienzo de algo, a ver de qué. Recorro las calles de Cádiz excavadas entre los corales blancos de sus azoteas. Como Rafael Alberti, le puse el nombre de Cádiz a todo lo dichoso. Las niñas se han bronceado y los pescadores se asoman al mar como ángeles de piedra, cansados de todo salvo de mirar. En todos los pescadores de Cádiz veo a Manuel Castells.
Son las ocho y veinticinco, el otoño ha mandado un burofax. Pedro Sánchez, oh vigilante de la playa de mis Españitas, se aparece rodeado de empresarios. Sánchez tiene una mano en Podemos y otra en el Ibex. El evento se llama “España puede”. Ojalá una coma. España, puede. España puede, eh, o no. Puede si quieren muchos, esto es si le apoyan los presupuestos, ahí ya nos vamos entendiendo. LA literatura de Moncloa es magnífica. Dijeron que este virus lo combatíamos unidos y España parecía 1935. Después dijo Pedro que salíamos más fuertes y todo eran muertos y pobres. Ahora, que España puede, y a uno le brota responder “A que no”.
Como no voy a los toros con Rosalía, el Gobierno me da ánimos, pero me pasa como a esos tipos que se están tambaleando en una cornisa y les gritan ‘No mires abajo’. Sánchez me recuerda constantemente la distancia que me separa del suelo. Me hablan con impulso de epitafio como cuando en las películas disparan a alguien y le dicen: “Te pondrás bien”, señal de que se muere.