El Rastro: "El papel lo que hace es fijar la memoria y, por lo tanto, establecer relaciones paradójicas"
Como cada lunes, Andrés Trapiello y Rafa Latorre se sumergen en un paseo por el Rastro madrileño.
Hoy Trapiello nos cuenta que "lo bueno del Rastro es que como durante todo el año compras cosas que, a veces, no te da tiempo a leer, te las traes a esos refugios y continúas el Rastro el resto del verano".
"Estoy tentado los domingos a levantarme un poquito más temprano los domingos y ponerme para mí mismo el propio Rastro. A mi edad se madruga siempre".
El domingo pasado Trapiello compró una revista del siglo XIX, "las revistas de siglo XIX me entusiasman porque es el siglo de la imprenta y de los periódicos. El siglo XIX es un siglo fascinante donde la imprenta da un estirón enorme tecnológicamente y donde los escritores para vivir se tienen que dedicar a escribir y llenar planas inmensas porque no había radio, los teatros no llegaban a todas las provincias y la gente estaba suscrita a dos o tres periódicos".
"Esta revista es especial, se titula La Guirnalda, periódico quincenal dedicado al bello sexo del año 1878. Siempre tengo curiosidad por saber quién publica este tipo de cosas" y se ha encontrado con un adelanto de la novela al estilo de La Celestina.
"En medio de esta revista me encontré una página espectacular, una esquela en primera página a Mercedes, la mujer de Alfonso XII, una esquela increíble. En medio me encontré una hoja arrancada de un periódico reciente, una página de El País, de la sección de cultura dedicada a García Márquez que publica en ese momento su última novela Memoria de mis putas tristes.
Trapiello es partidario de los medios digitales, pero quería hacer una reivindicación del papel porque "el papel lo que hace es fijar la memoria y, por lo tanto, establecer relacione paradójicas". Eso sí, considera que la novela de García Márquez "es muy mala".