¿Qué avances hay en la investigación del cáncer de piel?

Con nuestros amigos de la fundación Axa, en nuestra sección Constantes y Vitales vamos a hablarles del cáncer de piel y de los avances en la investigación de esta enfermedad.

Este anuncio es de finales de los años 80. Para entonces era normal ir a la playa, aunque sólo fueran un par de días, con el objetivo de volver a la oficina luciendo moreno. Todo el mundo entendía que había que acelerar el proceso de alguna forma, utilizando algo como el aceite de zanahoria, de coco.

En los años 90, ya se empezó a hablar de que había que protegerse contra los rayos UVB (responsables de broncearse, pero que también provocan quemaduras), sin olvidar los rayos UVA (que envejecen la piel). Aunque los primeros protectores tenían filtros de protección muy bajos, porque se entendía que si eran muy altos no te podías poner moreno.

Al principio, la protección más alta era para los más pequeños, aunque luego se generalizó para todas las edades. Ahora, afortunadamente, nadie duda que es conveniente ponerse el protector antes y después de bañarse, cuando se va a la montaña, utilizar sombrillas en la playa, sombreros o, incluso, paraguas para andar por la calle, que ya no resulta tan extraño como antes.

El problema es que la piel tiene memoria, sobre todo, cuando se acumula un daño detrás de otro. Es algo parecido como lo que ocurre cuando fumas. Quizá al principio no ocurre nada, pero si las células se dañan de forma paulatina, puede derivar en un cáncer.

Lo mejor es no exponerse a este riesgo, pero si ya es algo que no se ha podido evitar, lo mejor es detectar cuando antes el daño y, sobre todo, si se va a extender a través de una metástasis. Y eso ya es posible.

Ramón Pujol es Jefe del Servicio de Dermatología del Hospital del Mar y nos explica que una aspecto muy importante para aquellas personas que tengan muchos lunares es la autoexploración, porque así podrían detectar de manera precoz el cambio "de alguna de estas lesiones".

Inmaculada Hernández es investigadora del Instituto de Investigación del Hospital de Mar cuenta que no se sabe "qué tumor va a progresar luego a metástasis", pero que es importante determinar cuál de ellos va a tener más posibilidades de emigrar.