Blog de Alsina: “La Espe” uno de los liderazgos más carismáticos de la política
Les voy a decir una cosa. Nunca fue verdad (no consta en grabación alguna) que confundiera al Nobel Saramago con una señora llamada Sara y apellidada Mago, pero tampoco Sherlock Holmes dijo nunca “Elemental, querido Watson”y medio mundo acabó conociéndole sólo por eso. La leyenda urbana de Sara Mago, como la de Ricky Martin y la niña de la mermelada, corrió como la pólvora en la España de mediados de los noventa, cuando Aznar consiguió ganarle a Felipe, formó su primer gobierno y eligió como ministra de Educación y Cultura a una concejala del ayuntamiento de Madrid que aún tenía, por entonces, voz de pito.