¿Por qué ha sido tan complicado controlar el incendio de Sierra Bermeja?
Nos desplazamos hasta Málaga en JELO. Charlamos con Francisco Soriano, director técnico del Consorcio Provincial de Bomberos para conocer cómo han vivido las labores de extinción del fuego de Sierra Bermeja.
El incendio de Sierra Bermeja ha mantenido a España en vilo después de quemar más de 10.000 hectáreas, aunque afortunadamente ya ha sido controlado gracias a la labor de los cuerpos de seguridad. Para conocer esto a fondo, charlamos con Francisco Soriano, director técnico del Consorcio Provincial de Bomberos, que nos explica que desde un principio, "sabían que iba a ser difícil por la violencia de las llamas".
Se llegaron a detectar llamas de hasta 30 metros, debido a que se trató de una zona llena de pinos de unos 15-20 metros que ardieron completamente. Soriano reconoce que este incendio "superó la capacidad de extinción de los terrestres" y solo podían intentar contenerlo y evitar que alcanzara zonas vulnerables.
El incendio ha estado activo durante seis noches y se pudo controlar gracias a que el jueves comenzó a llover y eso permitió cercarlo. Sin embargo, recalca que "en esta zona los veranos y la vegetación son más secos", por lo que estos factores suponen que se produzcan incendios complicados.
¿Qué factores agravan un incendio?
El director técnico enumera los tres componentes que agravan un incendio: humedad relativa inferior al 30%, temperatura superior a 30º y velocidad del viento superior a 30 km/h. "El miércoles, con el inicio de las llamas en Sierra Bermeja, se dieron las tres causas", indica.
Además, fue necesaria la intervención de aviones para contenerlo, pero a razón de las características del terreno, tuvieron que echar el agua desde muy arriba, no obstante, las altas temperaturas ocasionaban que se evaporara antes de tocar el suelo".
Finalmente, Soriano se pronuncia sobre la muerte de uno de los bomberos en estas labores. Añade que todos los agentes necesitan una ruta de escape en los incendios por si fuera necesario, pero en este caso las llamas lo hicieron imposible.