EN JULIA EN LA ONDA

¿Es posible romper el techo de cristal en la Justicia?

A pesar de las luchas feministas, la igualdad real no ha llegado a sectores como la Justicia o la abogacía. Hablamos con María Eugenia Gay, decana del Colegio de la Abogacía de Barcelona, y María Luisa Segoviano, presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo, para conocer la situación en estos ámbitos.

ondacero.es

Madrid | 02.02.2021 19:24

Durante los últimos años, España ha experimentado un aumento de políticas, iniciativas y estrategias basadas en la perspectiva de género, sin embargo, todavía no se ha alcanzado una igualdad real entre hombres y mujeres. Para conocer cómo es la situación actual en el sector de la Justicia, hablamos con María Eugenia Gay, decana del Colegio de la Abogacía de Barcelona, y María Luisa Segoviano, presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo.

Explican que uno de los principios de esta institución es la igualdad, por tanto, "debe reflejarse en su propio funcionamiento y organización". Para ello, reivindican la figura de Ruth Bader Ginsburg, jueza de la Corte Suprema de los EEUU, que en una situación adversa, consiguió llegar a lo más alto y defender a las minorías.

Para ellas, la causa de la falta de mujeres en puestos importantes en la Justicia se debe a 3 factores: En primer lugar, que todavía se desconfía de las capacidades de las mujeres debido a la tradición machista existente. Además, que para acceder a estos cargos se deben realizar actividades externas, como escribir libros o dar seminarios, pero muchas de ellas no pueden por la falta de conciliación familiar. Para acabar, siguen sin carecer de la confianza necesaria para postularse porque creen que no son válidas, "cuando están perfectamente preparadas".

No obstante, la sociedad avanza y cada vez son más mujeres las que forman parte de la Justicia, en concreto son un 54 %, un porcentaje mayor que el de los hombres. Aclaran que "poco a poco se están debatiendo las leyes que no se hicieron con perspectiva de género" y añaden que es fundamental que lleguen a los poderes públicos para poder cambiarse.

La sentencia de La Manada, un antes y un después

España dijo 'basta' con la sentencia a La Manada y la posterior marcha del 8M se convirtió en histórica, al mostrar las diferencias que seguían presentando hombres y mujeres. Segoviano reconoce que sirvió de punto de inflexión y en los últimos años, se han dictaminado muchas sentencias en lo penal desde esta perspectiva. Se visibilizó la existencia de discriminación como el acoso o abuso sexual o la violencia de género. Para ambas, la desigualdad es "evidente" y hay que combatirla.