El presidente de la DO Ribera del Duero confiesa en Julia en la onda que en los 40 años de historia que cumple la marca Ribera del Duero se "se ha luchado mucho y se ha trabajado muchísimo".
"Esta comarca que se llama Ribera del Duero si no hubiera sido por el vino hubiera sido un desierto", afirma Enrique Pascual.
En esta comarca mucha gente del vino y el presidente de la DO dice que hay mucha ilusión en las nuevas generaciones y es algo que ha creado arraigo. "Sin la ilusión sería imposible seguir adelante", confiesa.
Además, Enrique Pascual explica que no solo hay bodegas grandes en esta DO si no muchas pequeñas y cree que es bueno que convivan todas. "La competencia nos hace mejores porque si no nos acomodaríamos y no haríamos nada", cree el presidente de la DO.