Juan Adriansens nos confiesa que "me gustaría que todas estas personas que tienen que ir a la cárcel, fueran a la cárcel de verdad". Opina que "hay un reblandecimiento de la moral colectiva" puesto que la sociedad trata como héroes a los ladrones. Además, nos comenta que "así como Roca está pimpante, Muñoz está muy mal".
Elisa Beni nos explica que "sólo habría diez personas que ingresarían en prisión". Para ella el problema reside en que "anticorrupción en muchas de las ocasiones se 'va de caña'" puesto que se tarda demasiado tiempo en publicar las sentencias y al final resultan ser demasiado benévolas. Asegura que "todo el sistema está previsto para que el político se corrompa impunemente".
Antón Reixa cree que "en mentes que son capaces de hacer eso, se incluye también ese tránsito de pasar por prisión a cuenta de disfrutar de esa herencia". Antón asegura que el problema es que "no hay mecanismo disuasorio con la corrupción".