El ministro de Política Territorial y Función Pública, Miquel Iceta, presentó su nuevo modelo de acceso de la Función Pública, que aspira a estar plenamente vigente en 2025 y que pretende agilizar los procesos de selección. Entre los cambios que propone Iceta está recortar el número de pruebas de las Oposiciones, que pasarían de ser tres a solo dos, y hacer los exámenes más cortos y menos memorísticos.
Elisa Beni, Pilar Gómez y Juan Manuel de Prada reflexionan sobre el aprendizaje basado en la memoria y qué consecuencias puede traer separarlo de las oposiciones. ¿Qué nos aporta y qué nos quita el aprendizaje memorístico en la era de la información? ¿Aprender las cosas de memoria garantiza su comprensión?
Para Juan Manuel de Prada el uso de la memoria es insustituible en el proceso del aprendizaje. Y Pilar Gómez comenta que "no se debe demonizar el aprendizaje mediante la memoria. El proceso del saber es, en gran parte, una acumulación de conocimiento".