Tras finalizar la investigación, la Policía de Tailandia mantiene la acusación contra Daniel Sancho de asesinato premeditado y ocultación del cuerpo. Estos son los mismos cargos que se presentaron el pasado 7 de agosto cuando el hijo de Rodolfo Sancho pasó a disposición judicial e ingresó en prisión provisional.
La defensa de Daniel Sancho sigue intentando demostrar que no ha habido premeditación en el asesinato de Edwin Arrieta, pero finalmente, tras una investigación de dos meses, el informe policial mantiene la acusación de asesinato premeditado.
El Código Penal de Tailandia prevé la pena de muerte para delitos como el asesinato con premeditación, pero, de dictarse, ésta suele ser después conmutada por la cadena perpetua. Así, el joven español podría enfrentarse a cadena perpetua.
Por otro lado, la confesión y cooperación de Sancho en el caso podría ayudarle a reducir la pena, según afirmó el propio juez al acusado el 7 de agosto, cuando pasó a disposición judicial.
Queda por ver cuándo será la fecha del jucio, algo que no se va a saber hasta que los fiscales realicen su propio informe y lo entreguen al tribunal de Samiu antes del 29 de octubre.
Daniel Sancho, de 29 años y que se encuentra en prisión provisional en la cárcel de Samui, fue detenido el 5 de agosto en Phangan, tras confesar ese día el asesinato y descuartizamiento del cirujano colombiano, cuyos restos fueron esparcidos por la isla y el mar.
El joven se encuentra sin abogado en Tailandia desde el 7 de septiembre, después de que el actor español Rodolfo Sancho, padre del acusado, prescindiera de los servicios del abogado tailandés Anan Chuayprabat (Kunh Anan) por "discrepancias en la defensa".
Sancho, que desde su ingreso en prisión comparece regularmente ante el juez de manera telemática, deberá contar con un abogado tailandés una vez comience el juicio y en el caso de no tenerlo el juez le asignará uno de oficio.