El hallazgo se produjo en la planta de Reciclado y Servicios del Mediterráneo ubicada en Villena. El operario dio aviso a la Policía Local y a la Guardia Civil al percatarse de que era un bebé, ya que al principio, pensó que se trataba de un muñeco.
Los restos humanos están en el Instituto de Medicina Legal de Alicante donde se espera que el resultado de la autopsia permita avanzar a los investigadores. Parece que no será fácil determinar la procedencia del cadáver porque la planta de reciclado recibe y trata basura procedente de gran parte de las provincias de Alicante, Valencia, Murcia y Albacete.