La reciente Ley de Bienestar Animal busca un trato digno y un bienestar para nuestros animales de compañía y nuestras mascotas. Entre sus nuevas medidas, se encuentra una normativa no exenta de polémica, que afecta directamente a los dueños y futuros dueños de perros: la obligatoriedad de realizar un curso formativo.
Una formación cuyo objetivo es "facilitar una correcta tenencia responsable del animal, muchas veces condicionada por la ausencia de conocimientos en el manejo, cuidado y tenencia de animales". En especial entre las personas que vaya a adoptar por primera vez, o tengan poca experiencia al respecto.
Para aquellos que ya tengan perro, el curso podrá realizarse en los dos años siguientes a la entrada en vigor de la ley (es decir, hasta el 29 de septiembre de 2025), mientras que los que vayan a adoptar, deberán completarlo antes de la adquisición del animal. Aquellos que no lo realicen en los plazos respectivos, se enfrentarán a multas de hasta 10.000 euros.
Desde el gobierno, se insiste en que con este curso se pretende educar, y no tanto sancionar. Tampoco hay que olvidar que los dueños de un perro, también deberán contratar (en caso de no tenerlo ya) un seguro de protección civil de daños a tercerosque incluya en su cobertura a las personas responsables del animal, por un importe suficiente que cubra los gastos que puedan surgir.