Lula da Silva se ha desplazado este miércoles a Brasilia para mantener una conversación con Rousseff y concretar esta supuesta incorporación al Ejecutivo. El exmandatario ya ha comentado a personas de su entorno dentro del Partido de los Trabajadores (PT) que ha aceptado la oferta.
Según 'O Globo', Lula podría estar al frente de una especie de 'superministerio' que tendría entre sus cometidos la recuperación económica y la respuesta al 'impeachment' contra Rousseff, aunque también se habría barajado su incorporación como ministro de Exteriores.
Lula fue detenido brevemente el pasado 4 de marzo para interrogarlo sobre la propiedad de un tríplex ubicado en el Edificio Solaris, un condominio de lujo ubicado de Sao Paulo construido por el grupo de ingeniería OAS, involucrado en el escándalo de corrupción de Petrobras.
Los investigadores creen que Lula es el verdadero dueño del apartamento y que lo habría recibido como pago por ejercer su influencia en la adjudicación de los contratos públicos de Petrobras, de acuerdo con la prensa local.
Rousseff ha criticado en varias ocasiones las medidas coercitivas aplicadas sobre su antecesor y la semana pasada llegó a apuntar que sería un "orgullo" tener a Lula da Silva como ministro del actual Gobierno.