Al menos 24 trabajadores han muerto y otros diez han resultado heridos al declararse un cortocircuito eléctrico en el sótano en el que trabajaban, en Tánger (Marruecos), según informan fuentes oficiales. Al parecer, se trata de una fábrica textil clandestina en la que trabajaban unas cuarenta personas, situada en un edificio residencial, cerca de la carretera de Rabat.
Las autoridades locales han señalado que el causante del cortocircuito que acabó con la vida de estos operarios de este taller podría ser una filtración de agua de lluvia en el barrio de Al Mars, tras la intensa tormenta que tuvo lugar anoche y que ha inundado muchas viviendas y locales de la región. Se cree que las abundantes lluvias caídas penetraron en la planta textil y electrocutaron a los obreros.
Además de los fallecidos, al menos diez personas han tenido que ser ingresadas en el Hospital Regional de Tánger, aunque no se descarta que queden más obreros atrapados en el edificio, por lo que continúan las labores de búsqueda y rescate.