El Tribunal Federal de Brasilia ha aceptado la denuncia presentada por el fiscal general, Rodrigo Janot, contra Lula, Delcidio Amaral -uno de los delatores del caso Petrobras- y otras cinco personas, lo que les convierte en "reos en acción penal".
El 24 de junio el magistrado del Tribunal Federal de Brasil Teori Zavascki, aprobó las acusaciones contra Lula y las remitió a la justicia capitalina por entender que es a ésta a quien corresponder llevar el caso, según informa la prensa local.
El líder izquierdista fue detenido en marzo en el aeropuerto de Sao Paulo para ser interrogado, tras lo cual la presidenta suspendida, Dilma Rousseff, le nombró 'súper ministro' con el objetivo de blindarlo frente a las acciones judiciales.
Lula, al igual que Rousseff, sostiene que las acusaciones son fruto de una venganza política y ha acudido esta semana a la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas para denunciar al juez federal Sergio Moro, que lleva el caso Petrobras, por "abuso de poder".