Las Unidades de Protección del Pueblo, milicias kurdosirias, apoyadas por combatientes de facciones rebeldes y con la cobertura de los aviones de la coalición internacional, expulsaron al EI de Serrín tras veinte días de enfrentamientos, indicó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Esta población era la última que quedaba en manos de los yihadistas en la ribera oriental del río Éufrates en el noreste de Alepo.
Entretanto, continúan los combates entre ambos bandos en la periferia de Serrín.
De esta manera, los efectivos kurdosirios controlan la orilla oriental del río Éufrates desde Serrín hasta la frontera con Turquía, y el territorio que se extiende desde la carretera que une Alepo con la provincia siria de Al Hasaka desde esta vía fluvial hasta el límite con Irak.
Hasta el momento, el Observatorio no ha podido verificar el número de víctimas durante los combates en Serrín.
Las proximidades de Serrín fueron objetivo ayer de la artillería turca desde su lado de la frontera, que atacó posiciones de las Unidades de Protección del Pueblo cerca de esta localidad y en el pueblo de Zur Magar, donde cuatro personas resultaron heridas.
En la madrugada del viernes, Ankara inició una ofensiva aérea contra posiciones del EI en el norte de Siria, que un día después amplió contra el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en la mitad septentrional de Irak.