García-Margallo ha hecho estas declaraciones a los periodistas tras la presentación en el Palacio de Santa Cruz del Informe de Estrategia de Acción Exterior.
"He hablado hace una hora con el ministro de Exteriores, que es a la vez ministro de Defensa, y me ha confirmado que esto ha sido obra de un soldado perturbado que está en busca y captura, y que se está haciendo todo lo posible para repatriar los restos de nuestros compatriotas a España", ha afirmado.
Las víctimas son ocho militares y tres civiles, -todos hombres, de entre 20 y 51 años-, precisa el Ejecutivo caboverdiano en un comunicado difundido en Lisboa, en el que no desvela sus identidades.
De entre los civiles, añade la nota, "dos son técnicos de nacionalidad española, que se encontraban en Cabo Verde prestando servicios en el local" que fue atacado, y un tercero de este país que también trabajaba con los españoles.