En un discurso durante la clausura de la conferencia política de Juventudes Socialistas de España, en la Universidad de Alicante, Sánchez ha afirmado que ahora sabe "para qué" se pusieron de acuerdo en estas normativas: "para la familia Pujol y para los compañeros de partido de Mariano Rajoy".
Frente a esta situación, ha abogado por "abrir un nuevo tiempo de convivencia donde se deje atrás el enfrentamiento entre catalanes y el resto de españoles", con el fin de crear "un periodo de convivencia, de confianza y de reforma constitucional que garantice y articule mejor la unidad de nuestro país".
En su discurso, el líder del PSOE ha incidido en que es un político "limpio", y ha asegurado que "en cuanto vea a alguien con un caso de corrupción" en su futuro Gobierno le sacará "tarjeta roja directa y fuera del partido".
También ha acusado al PP de querer centrar el debate político en las "descalificaciones y en añadir confianza y división" a una sociedad que ya ha sufrido "bastante", ante lo cual el PSOE hará "propuestas frente a las amenazas y dará soluciones frente al miedo".