Rafael Catalá: "Si lo que va a hacer el PSOE es ir al rebufo de Podemos, va a tener un problema"
El ministro de Justicia ha lamentado que el PSOE rompiera el acuerdo para que el exministro Fernández Díaz presidiera la comisión de Exteriores e insta a "respetar las reglas" en una legislatura que tendrá que basarse en el diálogo y los acuerdos.
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha hablado en Espejo Público sobre el cambio de opinión que tuvo el PSOE a última hora vetando al exministro Jorge Fernández Díaz para presidir la comisión de Exteriores.
Catalá reconoce que no entiende este cambio de opinión porque había un acuerdo con los socialistas y cree que hay "incoherencia" porque "teníamos un acuerdo en el que cada grupo parlamentario tenía un grupo de comisiones". El ministro lamenta además que "el balance que se haga de Fernández Díaz" sea este e insta a "respetar las reglas" en una legislatura que augura será de diálogo.
La decisión del PSOE en parte ha sido propiciada por las presiones de Podemos e incluso por la opinión de Pedro Sánchez, quienes instaban a que el presidente de dicha comisión fuera otra persona. Catalá ha explicado que había un acuerdo, por lo que su partido no se planteaba nombrar a otra persona y matiza que este hecho pone de manifiesto "la situación de tensión, que el PSOE está intentando encontrar su espacio, su discurso diferenciador respecto a nosotros" y añade que "si lo que va a hacer el PSOE es ir al rebufo el discurso de Podemos, tienen un problema".
Catalá se muestra confiado en que la legislatura que comienza este jueves se base en el diálogo y apuesta por trabajar en los "grandes temas" que afectan a España como el empleo o la economía.
El ministro de Justicia reconoce que van a tener que trabajar duro para llevar a cabo las reformas pactadas con Ciudadanos porque no tienen mayoría y necesitan al PSOE y aclara que no le es nada extraño que haya que consensuar y llegar a pactos porque "es la realidad que tenemos por delante".
Sobre el acuerdo con Ciudadanos de despolitizar la justicia, que consistía en cambiar el modelo de elección del Consejo General del Poder Judicial, explica que todavía hay que hablar de los detalles y consultar a expertos en dicha temática porque "estamos queriendo revisar ese sistema para encontrar el más legítimo y que se adecue mejor a la Constitución".
Otro reto que se marcó Rafael Catalá es llevar a cabo un gran pacto de Estado para dotar de medios y modernizar la administración de la Justicia. El ministro cree que es necesario llevar a cabo tres mejoras: Una de las leyes, para que sean más ágiles, otra de medios materiales, sistemas digitalizados más rápidos y por último más jueces o juzgados que puedan abordar el trabajo.
Catalá reconoce que es difícil poner fecha a todas estas mejoras, pero espera que "dentro de dos años haya un sistema de gestión" en toda la justicia española.
Preguntado sobre cómo van a regular las conocidas como 'puertas giratorias', Rafael Catalá reconoce que no es razonable que los políticos puedan pasar "de un lado a otro" y considera que "debería haber un periodo de enfriamiento" de dos o cinco años. El ministro de Justicia subraya que una característica de los jueces es la independencia y cree que si la abandona para "levantar una bandera de un partido, hacer campaña o ser diputado", queda dañada.
Respecto a los aforamientos, Rafael Catalá considera que el debate social está sobre todo en el ámbito de los políticos y cree que "hay un exceso de aforamientos" porque "hay muchos cargos que están aforados sin que haya una causa" razonable y añade que "hay margen para reducir sustancialmente" los aforamientos, aunque es difícil porque están recogidos en la Constitución o en los Estatutos de Autonomía. Sentencia que "habría que hacer una lista y ver por qué un diputado autonómico está aforado".
Sobre los indultos, Catalá cree que "debe existir una capacidad del Gobierno de ejercer el derecho de gracia" y cree que hay que poner en la ley lo que se está haciendo en la práctica
De la elección de Manuel Maza como Fiscal General en lugar de Consuelo Madrigal, dice que Maza es "un magistrado del Tribunal Supremo que lleva 40 años ejerciendo como juez" y subraya que "no he leído un solo comentario negativo" sobre él. Respecto a quienes tachan a Maza de "conservador", Catalá dice que no se puede definir a una persona que lleva tantos años ejerciendo la profesión con un sólo término y explica que "cuando hay unos cambios en la organización no
Preguntado sobre las declaraciones del fiscal Pedro Horrach, quien aseguró que "la condena de la Infanta sería una sorpresa" porque sería la primera vez en España que se condena a una persona por estos hechos, Catalá dice que como ministro de Justicia debe "confiar siempre en que los juzgados, cuando resuelven, lo hacen en derecho" y matiza las palabras del fiscal Horrach.
Sobre si no se ha respetado la presunción de inocencia de la Infanta Cristina, el ministro de Justicia dice que "ha habido tanto impacto mediático y tanta trascendencia que se crean prejuicios que a veces son negativos" y asegura que pese a la opinión de aquellos que creen que la condición de la Infanta ha influido en el juicio del Caso Nóos, Catalá asegura que "tenemos una justicia independiente" que no "actúa al dictado de nadie" y señala que los jueces actúan cada día con "absoluta independencia".
Respecto al tema de Cataluña, a colación de las declaraciones del exministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, quien decía que la vía jurídica no podía ser la única para resolver el conflicto de dicha comunidad, Rafael Catalá responde que mantuvo una conversación con el presidente de la Cataluña, Carles Puigdemont, en la que le explicó que "si estuvieras en mi lugar, harías lo mismo".
Rafael Catalá cree que el Gobierno ha trabajado mucho para resolver el conflicto catalán. Añade que "hemos defendido el Estado de derecho" y se muestra seguro de que se van a encontrar soluciones políticas para rebajar la tensión que se vive en Cataluña.
Sobre la agresión a dos guardias civiles en Alsasua, por la que han sido detenidas seis personas por hechos calificados como actos terroristas, Rafael Catalá responde que "la Guardia Civil trabaja por nosotros", lamenta que hayan sufrido esta agresión y explica que si un juez determina que es un acto de terrorismo habrá que acreditarlo.