El motivo de la reunión de Puigdemont y UGT en Waterloo
Los líderes de UGT y CCOO han iniciado una ronda de encuentros con partidos políticos para intentar lograr su apoyo y ya se han reunido con el PNV, Bildu y Sumar.
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, y su homólogo de este sindicato en Cataluña, Camil Ros, se reunirán este lunes, en Waterloo (Bélgica), con el expresidente de la Generalitat de Cataluña y líder de Junts, Carles Puigdemont, para abordar la reducción de la jornada laboral de 40 a 37,5 horas semanales, en un encuentro al que no asistirá el líder de CCOO, Unai Sordo.
Los líderes de UGT y CCOO han iniciado una ronda de encuentros con partidos políticos para intentar lograr su apoyo a la medida y ya se han reunido con el PNV, Bildu y Sumar. En los tres casos lo hicieron conjuntamente Sordo y Álvarez, pero el primero no acudirá ahora a Waterloo. Allí, Puigdemont tiene instalada su residencia tras huir de la Justicia española después del referéndum ilegal de 2017 y donde espera a que la ley de amnistía despliegue sus efectos sobre él cuando se supere el proceso judicial en marcha.
En el encuentro entre Álvarez y Puigdemont se analizará, según informaron desde UGT, la situación política y económica actual, entre otras cuestiones de actualidad, y se hablará de la reducción de la jornada de trabajo.
Ante algunas críticas recibidas por cerrar este encuentro, Álvarez argumentó que no ha oído "a nadie rasgarse las vestiduras ni criticar" que el presidente de la patronal catalana Foment, que además es uno de los vicepresidentes de la CEOE, se reuniera con el líder de Junts antes de las elecciones catalanas de la pasada primavera.
Negociación en crisis
"¿Qué pasa, que alguien piensa que nosotros no vamos a defender los intereses de los trabajadores y trabajadoras donde sea y con todos los instrumentos que tengamos en nuestra mano?", inquirió Álvarez el viernes en un congreso de UGT FICA, donde proclamó: "Lo vamos a hacer".
En paralelo, destacó que su sindicato va a seguir intentando que la CEOE "vuelva a la mesa de negociación" porque "dio portazo cuando fueron a ver a Puigdemont y llegó a la conclusión de que, seguramente, no iban a apoyar la reducción de la jornada".
A finales de noviembre, el Ministerio de Trabajo dio carpetazo a la negociación de la jornada laboral tras pedir a CEOE su pronunciamiento definitivo y que la patronal diera su negativa oficialmente a apoyar esta medida.
Tras ello, Yolanda Díaz sacó a audiencia pública el texto y, con toda probabilidad, se aprobará en Consejo de Ministros en las próximas semanas para iniciar posteriormente una compleja tramitación parlamentaria, en la que los siete votos de Junts podrían ser imprescindibles para que la medida se apruebe si el PP no allana la reducción del tiempo máximo de trabajo con una abstención.