El ingreso mínimo vital (IMV) subirá hasta un 6,9% en 2024. Así lo ha confirmado esta misma mañana la nueva ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, en su primera entrevista en el cargo. Recordemos que en 2022 esta ayuda experimentó un incremento extraordinario del 15%, con motivo de la crisis generada por la invasión rusa en Ucrania y por, también, el dato de inflación que entonces llegó a rozar las dos cifras. Ese aumento, que decimos del 15%, se mantuvo también durante todo 2023.
Ahora, las nuevas cuantías ascenderán en consonancia con las pensiones mínimas, que de la misma manera se revalorizarán hasta un 7%, según ha adelantado Saiz.
Por ponerlo en contexto de forma breve: el ingreso mínimo vital es -explica la Seguridad Social- una "prestación dirigida a prevenir el riesgo de pobreza y exclusión social de las personas que viven solas o están integradas en una unidad de convivencia y carecen de recursos económicos básicos para cubrir sus necesidades básicas". Es básicamente una renta garantizada que otorga el Gobierno a todos aquellos que cumplen los requisitos exigidos.
Así, la cuantía del IMV para el beneficiario individual o la unidad de convivencia es la diferencia entre la renta garantizada, que es la que fija el Ejecutivo, y el conjunto de rentas e ingresos de tales personales.
Es decir, en 2023, se fijó que una renta garantizada para un beneficiario individual es de 565,37 euros mensuales. Con todo, con la subida del 6,9% las nuevas cuantías quedarían de la siguiente forma: