El Museo Arqueológico Nacional se renueva para el siglo XXI
El ministro de Cultura, José Ignacio Wert, ha presentado el lavado de cara del Museo que reabrirá sus puertas al público el 1 de abril.
"Es el mejor paseo imaginable por la Historia de España a través de la colección de bienes arqueológicos más importante del país", según el ministro de Cultura, José Ignacio Wert. "Un museo totalmente nuevo, que ha quedado irreconocible", según el director del Museo Arqueológico Nacional, Andrés Carretero. En definitiva, una transformación en la que han participado más de 1.200 personas. Seis años de trabajo, dos años y medio de cierre y 65 millones de euros de inversión. Los resultados hablan por sí mismos: el Museo gana en superficie un 12,8%. Se nota sobre todo en el espacio destinado a las salas de exposición 7.582 metros cuadrados, lo que supone un aumento del 30,2%. También se han acometido otras mejoras como un vestíbulo más amplio, un salón de actos, una sala de conferencias, otra sala para exposiciones temporales, una cafetería y una tienda mucho más espaciosa.
Tres aspectos han guiado la intervención: calidad, innovación y accesibilidad. Pensando en la calidad, se ha reducido el número de piezas que componen la exposición permanente, pasando de 15.000 a 13.000. Se ha escogido lo más representativo y se ha eliminado lo redundante. En definitiva, una visión "minimal", como ha dicho a los periodistas la subdirectora del Museo, Carmen Marcos. La mayor parte de las piezas se han limpiado y restaurado. Los patios se han cubierto con vidrio climático, convirtiéndose en espacios destinados a obras de gran formato como el sepulcro de Pozo Moro. Y a todo esto hay que añadir las exposiciones temporales. La primera, todavía sin fecha, estará dedicada al Tesoro de la Fragata "Nuestra Señora de las Mercedes", recuperado después de un largo litigio con la empresa Odyssey.
En un museo de estas características no se puede cambiar un relato que, necesariamente, debe ser cronológico. Por eso, se ha optado por elaborar un discurso diferente, más claro y didáctico: desde la Prehistoria hasta el siglo XIX español, a lo que hay que sumar piezas de Grecia, Egipto, Nubia, Oriente Próximo y una completa colección de Numismática y Medallística. Además, se ponen en valor los grandes activos del Museo, como la Dama de Elche, la Dama de Baza o el Tesoro de Guarrazar. Son muy novedosos los 50 audiovisuales que se pueden ver en pantallas de plasma. Cuentan con el apoyo de textos, ilustraciones, mapas... y de 17 estaciones táctiles para que, tanto los visitantes como el público invidente, puedan palpar objetos.
En todo momento se ha tenido muy presente la accesibilidad. Las sillas de ruedas pueden llegar a todos los espacios del edificio, sean públicos o destinados a despachos. Para las personas con discapacidad auditiva, se han instalado bucles de inducción magnética en todos los puntos de atención al público y en todos los audiovisuales que, además, están subtitulados. Las guías multimedia también tienen audiodescripción, subtítulos o vídeos en Lengua de Signos.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, inaugurará la nueva etapa el 31 de marzo. Un día más tarde, el Museo Arqueológico Nacional volverá a abrir sus puertas al público. Para celebrarlo, la entrada será gratuita desde el 1 al 20 de abril. Después, el precio general será de 3 euros.