Destino publica “Los Cuerpos extraños”, la octava entrega de las aventuras de Bevilacqua y Chamorro

Lorenzo Silva: “Invitaría al futuro Rey a despegarse lo más posible de los resabios medievales de la institución”

El brigada y la sargento tienen, dice el autor, mucha vida por delante. Silva tiene en mente nuevas aventuras para ellos. Y sólo desvela unos pocos detalles. Habrá continuación de la saga pero no antes de un par de años, los dos agentes seguirán sirviendo en Madrid y no se descarta ningún escenario político. Enlazando con la actualidad del momento, Lorenzo Silva asegura que “hasta sería posible un escenario en el que este país no sea de facto una república federal porque tenga a lo mejor un monarca pero ese monarca se comporte como el presidente de una república federal. ¿Por qué no? Incluso si yo fuera asesor del monarca le invitaría a ir en esa dirección y a despegarse lo más posible de los resabios medievales de la institución”

ondacero.es

Madrid | 05.06.2014 19:24

Lorenzo Silva, Premio Planeta 2012 | EFE

Es el octavo libro con los mismos protagonistas aunque con éste, el autor dice cerrar un capítulo porque entre los ocho de la serie “hay camuflada una especie de trilogía que forman El Alquimista Impaciente (Destino, 2000), La Marca del Meridiano (Premio Planeta 2012) y Los Cuerpos Extraños y que podría denominar, con mucha tristeza, trilogía de la corrupción”.  La nueva novela de Lorenzo Silva habla de la corrupción de los representantes de la ciudadanía, frente a la corrupción de los agentes del orden que imperaba en La Marca del Meridiano y la corrupción privada, empresarial y hasta la de la propia sociedad que se convirtió en una suerte de protagonista en El Alquimista Impaciente. Silva rechaza la impasividad “ante esa realidad tan presente en nuestros días” y construye su novela “sobre ese ese planteamiento un poco quijotesco de que frente a ese fenómeno que espontáneamente brota por doquier, porque hay muchos intereses, muchas personas y mucho dinero, en disposición de respaldar esa corrupción, no quepa otra reacción que resignarnos a aceptar comportamientos y actitudes que son algo más que delitos que son factores de disolución y devastación de una comunidad”. Y defiende a algunos de sus personajes, convertidos en defensores de la ciudadanía porque, dice, “vivimos en una sociedad en la que muchas personas necesitan, aunque esto pueda parecer simplista o  ingenuo, un paladín o unos paladines, que en la Edad Media eran los que luchaban por quien no podía hacerlo”.

Los Cuerpos Extraños comienza con un aviso que el brigada Bevilacqua recibe mientras pasa el fin de semana en familia. Unos turistas han encontrado en la playa el cadáver de la alcaldesa de una localidad levantina cuya desaparición había sido denunciada por el marido. La trama, dice Lorenzo Silva, “está planteada como una catarsis a través de unos personajes que se niegan a convivir con esto, que saben que sus herramientas y recursos para enfrentarlo son limitados, que saben que se enfrentan a jugadores al otro lado del tablero que no sólo tienen ases y comodines en la manga sino que manejan hasta la banca pero que no se rinden”. Porque esta novela “entre otras muchas cosas, es una reflexión sobre la corrupción como fenómeno natural y espontáneo que anida en todas partes”.

Protagonistas sin desgaste

Han pasado diecisiete años desde que Silva encontrara el filón de Bevilacqua y Chamorro, eternos compañeros, eternos jefe y subalterno, eternos amigos. Guardias Civiles convertidos en protagonistas de una saga que nació, confiesa el autor, por una corazonada. “Empecé a escribir novelas con guardias civiles porque tuve la intuición de que había llegado el momento en que un guardia civil podía ser un héroe literario en España, y eso es mucho decir en un país en el que Federico García Lorca publicó El romance de la Guardia civil española, donde Pilar Miró rodó El crimen de Cuenca y donde tantas cosas han pasado”.

Ruben Bevilacqua y Virginia Chamorro conservan una relación que no se gasta y que no gasta a su inventor porque mantiene, dice, una política de austeridad. “No me he cansado de ellos porque no los he exprimido ni los pienso exprimir, no me he adherido nunca a esa política de la cosecha anual, creo que eso desgasta mucho al personaje serial y tampoco voy a hacerlo en el futuro”. Por eso la próxima entrega de la serie no llegará hasta dentro de dos o tres años. Lo que sí promete Lorenzo Silva es que habrá nuevas aventuras. “A Bevilacqua le quedan 14 años de actividad, a Chamorro 24, ese es el horizonte máximo. Cuando llegue el momento de su jubilación se jubilará y no sé si veo muy clara una saga que siga con un Bevilacqua jubilado haciendo de consultor desde su casa”.

Tampoco se ve, Silva, abandonando la novela negra, un género que reivindica por su valor literario propio, conquistado “por el talento de los escritores, de muchos jóvenes de talento” que escriben y publican novela negra en España “y que están haciendo que la literatura española a través de este género conecte con este instante tan convulso y tan confuso de una manera como a lo mejor históricamente la literatura española no había conectado”.

Los Cuerpos Extraños es, según el fiscal General del Estado, Eduardo Torres Dulce, maestro de ceremonias en la presentación del libro, “la novela más íntima de la saga” pero a la vez, “una metáfora terrible de  un estilo de vida de las cloacas-sumideros de la política española”. Y ha terminado el fiscal agradeciendo al autor “haber logrado que Bevilacqua y Chamorro formen parte de nuestras vidas nuestras emociones y nuestros recuerdos. Y hay que darles las gracias porque acaban envolviendo tu vida”.