De dónde vienen los Niños de San Ildefonso de la Lotería de Navidad 2025
Son las voces y los rostros de la suerte cada 22 de diciembre, pero su historia va mucho más allá del sorteo. Te contamos qué es la Residencia de San Ildefonso y cómo se eligen a los pequeños cantores.
Lotería de Navidad 2025, en directo: el Gordo, Segundo Premio, pedreas...
Durante unas horas, son las personas más famosas de España. Con sus uniformes impecables y ese ritmo inconfundible al cantar "mil eeuuuurooos", los Niños de San Ildefonso son el alma de la Lotería de Navidad.
Pero cuando se apagan los focos del Teatro Real, estos pequeños vuelven a su realidad cotidiana, una realidad muy distinta a la leyenda urbana que todavía perdura en la mente de muchos.
Ni huérfanos, ni actores: Estudiantes de un internado
La creencia popular más extendida es que los niños son huérfanos. Esto es falso a día de hoy, aunque tiene una base histórica.
Los niños proceden de la Residencia Internado San Ildefonso, una institución educativa pública perteneciente al Ayuntamiento de Madrid. Ya no es un orfanato. Actualmente, el centro acoge a chicos y chicas de entre 6 y 14 años cuyas familias atraviesan circunstancias socioeconómicas o laborales difíciles, ofreciéndoles apoyo escolar, alojamiento y manutención de lunes a viernes (aunque muchos vuelven con sus familias los fines de semana).
Un reflejo del Madrid moderno
Si algo caracteriza a la "plantilla" de los Niños de San Ildefonso en este 2025 es su diversidad. La residencia es un espejo de la sociedad madrileña actual.
En el escenario del Teatro Real vemos niños de múltiples orígenes: españoles, latinoamericanos, africanos, europeos del este... Muchos de ellos son nacidos en España de padres inmigrantes, integrando en el sorteo una riqueza cultural que ya es habitual en las aulas de cualquier colegio del país.
¿Cómo se eligen a los que cantan?
No todos los niños de la residencia participan en el sorteo. Participar es voluntario, y para llegar al escenario hay que pasar un "casting" y meses de ensayo.
Desde el mes de octubre, los educadores y directores musicales de la residencia seleccionan a aquellos que cumplen tres requisitos clave:
- Buena voz y proyección: Deben ser capaces de cantar claro y alto para que se entienda el número.
- Ritmo: La cadencia al cantar es fundamental para la dinámica del sorteo.
- Nervios de acero: No es fácil plantarse ante un teatro lleno y millones de espectadores por televisión sin que les tiemble la mano al coger las bolas.
Más de dos siglos repartiendo suerte
La relación de estos niños con la lotería es una de las tradiciones más antiguas de España.
- El origen: El primer sorteo en el que participaron fue el 9 de marzo de 1771, bajo el reinado de Carlos III. El primer niño en cantar un número fue Diego López.
- La gran revolución: Hasta 1984, solo cantaban varones. Ese año fue histórico porque las niñas entraron por primera vez en el sorteo. De hecho, Mónica Rodríguez fue la primera niña en cantar un Gordo en 1986, rompiendo siglos de tradición masculina.
Hoy, estos chicos no solo reparten millones, sino que reciben el cariño de todo un país que los ve crecer año tras año