La portavoz de Naizen, Bea Sever, apunta que a raíz del debate sobre la ley trans estatal, han leído y oído muchas falsedades, mentiras, bulos, y mensajes de odio, que han sido el caldo de cultivo de posibles agresiones y de actitudes que generan sufrimiento y vulneraciones de derechos humanos básicos. Se ha señalado a niños y niñas en la escuela por parte de sus compañeros, un mensaje de odio que han aprendido dentro de sus hogares.
Bea Sever invita a abandonar los mensajes destructivos ya que ante la transexualidad sólo hay dos caminos: negarlo y tener una infancia dramática; o aceptarlo y acompañarles en el tránsito. Desde la asociación opinan que la película, les va a servir para visibilizar a la infancia transexual, una realidad a la que la directora del film, se ha acercado con gran sensibilidad. Un filme que va a posibilitar acercarse a la transexualidad infantil no desde prejuicios, discursos o ideas, sino desde dentro, desde la vivencia de esa niña que necesita ser vista, desde las dificultades que vive esa familia para comprender lo que está sucediendo, para aceptarlo, para acompañarlo.
Las personas trans podrán modificar su sexo legal en el Registro Civil sin someterse a condiciones médicas. Actualmente, deben aportar un informe que les diagnostique disforia de género y haber pasado dos años de hormonación. Estos requisitos se eliminan. Lo podrán hacer en tres tramos de edad y una doble solicitud: los mayores de 16 años sin requisitos, los que tienen entre 14 y 16, con el consentimiento de sus progenitores y entre 12 y 14, con aval judicial. Los menores de 12 años no podrán hacerlo. Una vez solicitado, se citará a la persona a una comparecencia para que manifieste “su disconformidad” y en el plazo máximo de tres meses deberá volver a reiterar la petición.