COVID19

ELA ve indignante que Chivite pida flexibilidad con el Real Decreto

En una entrevista a Onda Cero Navarra, el secretario general de ELA, Imanol Paskual, critica las declaraciones de María Chivite y analiza los efectos del Real Decreto

Onda Cero Navarra

Pamplona | 31.03.2020 09:49

La petición de la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, a Pedro Sánchez para que éste dé “flexibilidad a la hora de aplicar el Real Decreto” que paraliza “toda actividad económica no esencial”, molesta a sindicatos. Chivite, además, reclama que sea cada comunidad “quien diga qué es esencial y qué no”.

Desde el sindicato ELA, su secretario general, Imanol Paskual, cree que “el Gobierno de Navarra se equivoca”. Defiende que “llevan semanas defendiendo que se paralicen las actividades no esenciales”. Ven en general bien la medida tomada por el gobierno de Pedro Sánchez, aunque con matices.

Paskual asegura que, sin excusarles, entiende a la patronal, a la CEN, ya que “defiende unos intereses”, pero ve “casi indignante” la posición de María Chivite. La flexibilidad pedida busca que “sea el menor número de empresas posible las que cierren”.

“El Gobierno debe preocuparse por la salud pública y estamos preocupados con estas declaraciones”, declara el secretario general de ELA. Asimismo, insiste en que “los centros de trabajo son un foco de contagio”, por lo que alude a la paralización “por el bien de la salud”, algo en lo que en su opinión “el Gobierno de Navarra debería estar a la vanguardia”.

Sobre la prohibición del despedido, la petición de ERTEs y los permisos retribuidos, Paskual cree que “existe un escenario de confusión”. Subraya que “es irrebatible” que el permiso retribuido es “una especie de adelanto de las vacaciones recuperable al cien por cien”. Lo que implica, según su parecer, que “el sacrificio recae en los trabajadores”. Lamenta la “absoluta desproporción”, ya que “las empresas en un momento de menor actividad les va venir bien en esa parte” y que cuando se salga de esta crisis “las empresas van a tener una flexibilidad casi absoluta por parte de los trabajadores cuando lo necesiten”.

Recalca que el sindicato es consciente de la “situación complicada”, así como de la necesidad de todos de arrimar el hombro para volver al crecimiento económico, “pero tiene que ser equitativo”.

Apuntilla que es una medida de doble filo, y que “en un mercado de trabajo tan precario” las consecuencias son peores. Explica que “en Navarra tenemos el doble de temporalidad que en la Unión Europea”, por lo que “la destrucción de empleo va a ser enorme”.

Cesa la actividad no esencial, y ahora surgen los problemas con la interpretación del Real Decreto. “Hay empresas que el sindicato interpreta de la lectura del Decreto que tiene que paralizarse pero la empresa interpreta que no”, explica. A lo que lamenta que “no saben quién es la autoridad competente para determinar el cierre de las empresas”. En navarra, hay unos 15-20 casos que tenga constancia el sindicato ELA en los que “la empresa entiende que es una actividad esencial y el sindicato entiende que no”. Por ejemplo, explica, “una empresa de frenos, no creemos que sea esencial, pero la empresa se agarra a que un porcentaje es para ambulancias”. Sin embargo, matiza que “eso no es lo que dice el Decreto, tiene que ser la actividad principal”. Motivo por el cual cree que “se necesita agilizar” esta cuestión. Y es que en opinión de ELA “los centros de trabajo son focos de contagio y hay que cortar estos focos”.