Santiago de Compostela |
La alcaldesa de Santiago, Goretti Sanmartín, ha negado que vaya a haber "novedades" próximamente sobre la demolición de la Casa da Xuventude.
El Concello de Santiago le trasladó a la Diputación "en tiempo y forma" que el uso de ese espacio para servicios administrativos del ente provincial "decaía" al no firmarse el convenio.
Ahora, continúan en la fase de estudio y reflexión, sin que vaya a haber novedades al respecto en un horizonte próximo. Con todo, sí ha reconocido Sanmartín ue siguen con la idea que llevaban en campaña, demoler la edificación.
Por su parte, la socialista Mercedes Rosón ha asegurado que "las peleas internas del bipartito le están costando dinero al Concello de Santiago".
Rosón afeó al gobierno compostelano "echasen a perder" la ayuda de la entidad provincial "a la espera de que una convenza a la otra de derribar o mantener" un equipamiento público que, desde las filas socialistas, califican como "estratégico" para la dinamización del entorno del casco histórico.
Mercedes Rosón señala que "se trata de un edificio que, aunque fallido en su envolvente, tiene mucho potencial para el uso del tejido asociativo y como espacio para la promoción de actividades culturales"
Señala Rosón que esta decisión "ni resuelve la cuestión del parque de bomberos ni responde al futuro del edificio de la Plaza del Matadero".
A este respecto, los socialistas alertan que el proyecto "estaría en conflicto con una posible ubicación en ese mismo espacio del parque comarcal de bomberos para el que, de momento, tampoco hay alternativa".
"Esto cuando en un plazo de dos o tres años, las obras de ampliación del edificio administrativo de San Caetano obligarán a desalojar las actuales dependencias de los bomberos del municipio", insisten.