El documento del PXOM llega a los ciudadanos con la exposición pública durante tres meses
Se abre el periodo de alegaciones después de la aprobación inicial que contó con el apoyo del gobierno socialista y el BNG - Todos los planos de ordenación y gestión se encuentran en la antigua sede del Banco de España
El documento del nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de Ourense, después de la aprobación inicial por parte de la corporación municipal, llega hoy a los ciudadanos con la exposición pública, en una de las plantas del antiguo edifico del Banco de España, que ocupa el Concello en régimen de alquiler, durante tres meses, después de que se aceptase una propuesta del BNG que lo amplía un mes más, debido a que se espera un importante número de alegaciones, que podría llevar consigo modificaciones.
De esta forma, los ciudadanos interesados en conocer el documento podrán realizar sus consultas de lunes a viernes en horario de 9.00 a 14.00 horas, y contarán con técnicos municipales que asesorarán y resolverán las dudas y cuestiones que se puedan plantear en relación con el nuevo planeamiento urbanístico. Para el alcalde, Agustín Fernández, es la "cuestión más importante", como así lo puso de manifiesto durante el acto de inauguración que tuvo lugar ayer en la apertura de la exposición con motivo del inicio de la información pública de la revisión y adaptación del PXOM, y a la que asistieron miembros del gobierno, no todos, y del BNG, con las ausencias del PP, sobre la que dijo que "es una vergüenza" y que le parecía "indignante", así como los ediles de DO. Lo que sí acuderon fueron los representantes de instituciones, organizaciones sindicales, sociales y vecinales.
Más allá de las cuestiones puramente técnicas, que se plasman en los planos de ordenación y gestión urbanística, Agustín Fernández destacó que se trata de un documento que pretende ser "sólido, con seguridad jurídica y en el que priman los intereses de la colectividad", por lo que no prima, precisamente, todo lo relacionado con la edificabilidad, sino los equipamientos públicos, las infraestructuras viarias, el espacio empresarial y las zonas verdes.
De ahí que justificó la importante reducción del número de viviendas, al señalar que en todo lo concerniente con el ámbito residencial "debemos establecer el que se necesita, en base a los estudios realizados", ya que "no se puede construir para luego tener viviendas vacías", en alusión a que Ourense es una de las ciudades de España que en estos momentos cuenta con más viviendas vacías.
La proyección de futuro que se concreta en el documento, en lo que se refiere a crecimiento, es para el alcalde "suficiente", con lo que rechaza las críticas que por parte del PP y de otros colectivos sobre que se trata de un documento "restrictivo".
Alegaciones y modificación
En cuanto al anuncio realizado por el BNG, en el momento de prestar su apoyo a la aprobación inicial, y que agradeció el alcalde, sobre el importante número de alegaciones que se presentarán al documento, y que llevarán consigo modificaciones del mismo, Agustín Fernández entiende que "es normal, ya que se abre a 108.000 vecinos", por lo que las previsiones es que "se presenten miles de alegaciones".
Es por eso que Agustín Fernández no dudó en apelar a la "responsabilidad y solidaridad" de los ciudadanos, en el sentido de que "piensen más en los intereses colectivos que en los particulares", aunque entiende que cada uno "mire por su propiedades". Una cuestión en la que también incidió la concejala de Urbanismo, Áurea Soto, que con la contundencia que le caracteriza advirtió que "esperamos que los ciudadanos no piensen tanto en el Registro de la Propiedad, y si en el modelo de ciudad que representa el nuevo PXOM".
Así, una de las claves de actuación, en materia de edificabilidad, es que se pasa de las 55.000 viviendas del plan de 2003 a las poco más de 19.500 viviendas, que supone una importante reducción, justificada en que en los últimos 10 años no se incrementó el número de habitantes pero si se actuaciones en suelo residencial, con lo que actualmente son más de 15.000 las viviendas vacías que hay en la actualidad en el Concello.