Extremadura notificaba 6 casos de acoso escolar durante el último curso, uno más que en el curso precedente
Dos de ellos fueron por ciberacoso, en total se registraron 46 denuncias por posibles casos de acoso durante el pasado curso.
El Pleno del Observatorio de la Convivencia Escolar de Extremadura, analizaba ayer el informe sobre convivencia escolar del pasado curso, 2020-2021, elaborado por la Inspección Educativa. De este informe se desprende que el pasado curso se constataron 6 casos de acoso escolar en Extremadura, un caso más que el curso anterior. Estudio realizado en los 712 centros escolares de la región.
De los 6 casos constatados de acoso escolar, 2 fueron de ciberacoso. Durante el pasado curso, se registraron 46 denuncias por posibles casos de acoso escolar, 9 menos que el curso 2019-2020 y 77 menos que el curso 2018-2019.
En cuanto a las denuncias, 46 registradas por posibles casos de acoso, hay que señalar que en la mayoría de los casos han partido de la propia víctima, que lo ha comunicado a su centro educativo, en el 50 por ciento de los casos. También han partido de la familia en un 33 por ciento y de los servicios sociales de un Ayuntamiento en un 17 por ciento, según indica la Junta en una nota de prensa.
Además, durante el pasado curso escolar, se han registrado 57.894 casos de conductas contrarias a las normas de convivencia. Son 5.209 más que el curso 2019-2020, pero 15.236 menos que el curso 2018-1019. Se refiere, fundamentalmente, a perturbar el normal funcionamiento de las clases.
Un total de 28.380 estudiantes han estado implicados en estos casos de conductas contrarias a las normas de convivencia y son menos estudiantes que en los dos cursos anteriores, unos 38.378 en el curso 2019-2020 y 34.051 en el curso 2018-2019.
Como en cursos anteriores, es en la ESO donde se producen más incidentes contrarios a la convivencia. Las conductas más reiteradas son las actuaciones incorrectas hacia algún miembro de la comunidad educativa, un 32 por ciento, o la perturbación del normal desarrollo de las actividades de clase, un 30 por ciento. En cuanto a las correcciones, se aprecia, como en el curso anterior, que la medida más utilizada es el apercibimiento, bien oral (27 por ciento), o bien por escrito (56 por ciento). Estas conductas se produjeron, de manera mayoritaria, en las clases (84 por ciento) y en los recreos (6 por ciento).
Por otra parte, si tenemos en cuenta las conductas gravemente perjudiciales para la convivencia, se han registrado 10.902 casos de este tipo, mientras que en el curso anterior fueron 5.767 y en el curso 8.930 en 2018-2019.
En estos casos de conductas gravemente perjudiciales para la convivencia, hay 6.670 estudiantes implicados. El curso pasado fueron 4.135 y hace dos cursos, 6.120 alumnos. Se trata de injurias y ofensas contra un miembro de la comunidad educativa (28 por ciento), seguida de actuaciones perjudiciales para la salud y la integridad, o incitación a ello (16 por ciento), de manera mayoritaria.