El abono del autobús urbano seguirá siendo gratuito en Mérida hasta final de año

El abono del autobús urbano seguirá siendo gratuito en Mérida hasta el 31 de diciembre, ya que el ayuntamiento asumirá el 70% del coste que no cubre la subvención del Gobierno central (30%) para este fin.

Así lo ha anunciado este jueves el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna, que ha destacado que se trata de una medida no solo para aliviar los bolsillos de los ciudadanos, sino también para "concienciar del uso del transporte público" que tiene un impacto directo en las emisiones de CO2 a la atmósfera y en la reducción del flujo de tráfico.

Esta medida entró en vigor a partir del 1 de enero y se prolongará hasta final de año tras la renovación del acuerdo por parte del Gobierno local. El billete individual seguirá teniendo el mismo coste ya que la medida afecta a los abonos.

"Estas son las políticas públicas que favorecen al ciudadano, que permiten una movilidad sostenible, que ayudan a las familias a asumir los costes diarios del transporte y que forma parte de un proyecto social integral para estar al lado de todas y todos", ha insistido el regidor emeritense.

Y esa medida se ha dejado notar en el primer semestre de este año en el número de usuarios que han utilizado el bus urbano en la capital extremeña. No en vano, en este período se han adquirido 30.663 recargas de bonos, lo que supone un aumento del 300% con respecto al 2022 cuando fueron algo más de 10.000.

Además, en esos primeros seis meses del año el transporte urbano de Mérida ha tenido un total de 561.684 viajeros, lo que supone 158.204 viajes más que hace un año, "lo que pone en evidencia que los y las emeritenses han hecho un uso mayor del transporte público aprovechando estas ventajas económicas con un crecimiento considerable de viajes", ha recalcado Rodríguez Osuna, para el que se trata de "la movilidad más justa socialmente".

El bono de 10 viajes tiene un coste de 5'50 euros, y el importe total que corresponde al 100% de la subvención de los bonos gratuitos asciende a más de 200.000 euros que asumen las administraciones, un 70% de esa cuantía la costea el ayuntamiento de Mérida para permitir la gratuidad del transporte público.

"Esta medida es más justa en términos sociales, más inclusiva y tiene un alto impacto en la economía de las familias de nuestra ciudad, además, es una pieza clave para conseguir los objetivos climáticos que nos hemos planteado desde el Gobierno de España y nuestro ayuntamiento", ha explicado.

Asimismo, ha indicado que "hay un compromiso electoral" de crear una nueva línea de bus urbano que podría estar operativa en enero y que servirá para recudir los tiempos de recorrido en aquellas líneas más demandadas.

Por otro lado, el alcalde ha insistido en que el mayor uso del transporte público "sirve también para calmar el tráfico" rodado por la ciudad.

En este sentido, ha señalado que "en breves días" se acabarán las obras en la calle Graciano y empezarán las de John Lennon" para terminar un proyecto que continuará en la zona de la Puerta de la Villa y "hacer una ciudad mucho más amable".