La Unión de Consumidores rechaza los peajes en autovías en 2024 anunciado por el Gobierno Central
Explican que los consumidores ya pagan impuestos ahora por las autovías y explican que por ejemplo, viajar de Badajoz a Mérida cada día supondría un coste de 300 euros anuales.
La Unión de Consumidores de Extremadura (UCE) ha manifestado su "más enérgico rechazo" a la "imposición" de "peajes" en autovías en 2024 por parte del Gobierno central, por considerar que la medida "perjudicará a todos" y "muy especialmente" a regiones como la extremeña.
Tras incidir en que los consumidores ya pagan impuestos ahora por las autovías, ha advertido de que, por ejemplo, viajar de Badajoz a Mérida cada día supondría un coste de 300 euros anuales.
En este sentido, lamenta que si los planes del Gobierno salen adelante, en 2024, los poco más de 500 kilómetros de autovías estatales que actualmente están en servicio en Extremadura dejarán de ser "gratuitos"; al tiempo que recalca que ahora ya "todos y cada uno de los conductores pagan impuestos que, entre otras cosas, se usan para conservar estas autovías" y, por tanto, ya están "pagando por ellas".
Así, en nota de prensa, la Unión de Consumidores de Extremadura se opone "frontalmente" a esta medida, pues entiende que los consumidores serán "triplemente perjudicados". En primer lugar, porque todos los conductores, usen o no esas autovías, están pagando un impuesto, el de hidrocarburos, que supone alrededor del 50 por ciento del precio de cada litro de combustible que se reposta, "precisamente, para contribuir a la conservación de las carreteras estatales".
En segundo lugar, según añade, por el propio peaje que se cobraría; y, por último, "por el encarecimiento generalizado que se produciría en todo tipo de productos al subir el coste del transporte por estas vías".
Además, el colectivo incide en que quienes viven en provincias periféricas, lo van a "sufrir aún más". Primero, porque las distancias son "mucho más largas" que en otras provincias, lo que supondrá "un mayor gasto"; y, segundo, "porque la alternativa del transporte público propuesto por el Gobierno para evitar pagar peajes, no es válida" en Extremadura, pues no cuenta "con trenes ni autobuses que puedan sustituir al automóvil particular".
Al respecto, advierte de que si esta medida sale finalmente adelante, viajar de Badajoz a Madrid tendría un coste aproximado de 4 euros; de Plasencia a Sevilla 3,5 euros. "Y si vivimos en Badajoz y trabajamos en Mérida, situación muy frecuente en nuestra región, cada día tendríamos que pagar 1,20 euros, lo que traducido a lo largo del año supondría un coste total de unos 300 euros anuales", asevera la UCE.
Por último, apunta que podría suponer un aumento "muy importante" de la siniestralidad, pues, según una reciente encuesta del RACE, el 80 por ciento de los conductores se plantearía dejar de usar las autovías y volver a las carreteras convencionales, donde se produce el 78 por ciento de los accidentes mortales, añade.