Ingresa en prisión un joven detenido por la Policía Nacional de Elche tras reincidir en el robo en máquinas expendedoras 24 horas
Otra investigación de la UDEV identifica a una mujer que está acusada de distintos delitos de estafa por el denominado método del ‘hurto o cambio mágico’ perpetrado en comercios de destinos municipios, entre ellos de Santa Pola
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Elche a un hombre que está acusado de robar en hasta seis máquinas expendedoras con funcionamiento de 24 horas instaladas en distintos puntos de la ciudad.
Siempre actuaba en horario nocturno, aprovechando la ausencia de gente por la vía pública, para, empleando una tapa de alcantarilla de las inmediaciones fracturar el cristal de la máquina expendedora para sustraer de su interior todos los productos que quería.
Pese a haber sido identificado o en distintas ocasiones, continuaba robando por lo que tras ser puesto a disposición judicial se ha dictado para su ingreso en prisión.
Se trata de un joven de 20 años y nacionalidad marroquí.
[[H4:‘Hurto o cambio mágico’]]
Por otro lado, agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía Nacional ha identificado a una mujer que está acusada de distintos delitos de estafa por el denominado método del ‘hurto o cambio mágico’ perpetrado en comercios de hasta diecisiete municipios del país, entre ellos de Santa Pola.
La mujer identificada es de nacionalidad española, tiene 43 años y su último domicilio conocido está en Zaragoza. Se le atribuye una de esas estafas en un establecimiento de la villa marinera.
El ‘hurto o cambio mágico’ se plasma en la realidad en distintas modalidades. En una de ellas, la persona que lo perpetra se dirige al trabajador con un montón de billetes de cinco euros, solicitándole que se los cambie por billetes de mayor valor, siendo un total de 500 euros y, cuando abandona el comercio, la víctima se percata que de alguna manera el delincuente ha logrado llevarse una gran cantidad billetes de 5 euros, de los que había pedido cambiar.
En otras ocasiones, el autor de la estafa realiza una compra en un establecimiento de un producto de bajo precio, como mucho dos o tres euros, y entrega para el pago un billete de 100 o 200 euros.
Cuando el vendedor entrega el cambio, el autor lo guarda procurando esconder parte del dinero para después mostrar su disconformidad con el producto adquirido y solicitar que se le devuelva el billete que entregó. En ese momento empiezan los problemas porque el delincuente trata de ocultar parte del dinero, solicita de nuevo el cambio en billetes más pequeños y siempre genera desconcierto y dudas en quienes los atienden sobre la cantidad entregada y el cambio recibido. Finalmente se apropia de alguna cantidad que oscila entre los 100 a 300 euros dependiendo del importe inicial entregado y se marchar del establecimiento.