El hormigonado de la cubierta del colegio Miguel de Cervantes de Elche se hace en horario de clase y el centro acaba vacío de alumnos
Los apenas cien escolares que han acudido han estado todo el horario lectivo en el patio pese a la insistencia del Ayuntamiento de que la seguridad está garantizada
Elche | 11.09.2024 15:13
La mayoría de los alumnos y las alumnas del colegio público Miguel de Cervantes de Elche no han acudido este miércoles a clase y los pocos que lo han hecho han permanecido en el patio durante todo el horario lectivo.
El centro tiene en torno a medio millar de matriculados y han ido al centro menos de un centenar.
El motivo ha sido que coincidiendo con el horario de las clases, durante el día se han ejecutado los trabajos de hormigonado de la cubierta del edificio. Ante esa situación, la dirección del colegio ha llevado a la práctica el refrán de ‘más vale prevenir que curar’ y ha decidido que los niños no iban a entrar a clase y se quedarían durante toda la jornada lectiva en el patio, como así ha ocurrido.
Del malestar por esa decisión han dado cuenta los padres de alumnos del colegio no llevando a sus hijos a clase y convocando una concentración, con pitada incluida, a las puertas del colegio.
Agentes de la Policía Local de Elche se han personado esta mañana en el colegio en una acción que, según se ha explicado desde el cuerpo, ha sido de trámite, de comprobación de las obras que se están llevando a cabo.
También han estado en el colegio los concejales Claudio Guilabert, de Espacios Públicos y Contratación, María Bonmatí, de Educación, y Francisco Soler, responsable del área de Urbanismo, que han explicado a los padres que la compatibilidad de las obras con las clases es una situación segura.
De hecho, desde el equipo de gobierno se ha hecho público un informe técnico de fecha 6 de septiembre que, a colación de la coexistencia de las obras y las clases en los colegios Sanchís Guarner y Miguel de Cervantes, concluye que en base a las “medidas de seguridad adoptadas” y “la coordinación” entre las direcciones de los centros y la empresa responsable de las obras “no existen problemas ni riesgos significativos derivados del solapamiento entre las actividades escolares y las obras en la cubierta”.
Educadores que faltaban, contratados
Por otro lado, los padres del colegio Miguel de Cervantes han conocido que las dos plazas de educador/a que estaban aún vacantes, entre ellas la del aula UECO, con niños y niñas con necesidades especiales, se han cubierto, de modo que, en principio, este jueves ya estarán en el centro.