“Bajen a la tierra, pisen por donde pisan sus vecinos y vecinas, pónganse en su piel y mejoren su calidad de vida”

Buenos días a todos, Sr. Alcalde, concejales y concejalas y público asistente.

Mi nombre es Inmaculada Blasco y represento a los vecinos y vecinas de El Altet, Balsares y Arenales del Sol, o como ustedes la nombran, junta municipal de El Altet y Balsares.

Un año después y la vida sigue igual. En inversiones res de res, servicios iguales o peores e instalaciones deteriorándose a gran velocidad por falta de cuidados y mantenimiento.

En lo referente a inversiones, decir 0 es exagerar, pero que han sido escasas no lo es tanto. De los más de 10 millones destinados en el presupuesto municipal a este capítulo, a nuestra zona no van destinados ni 100.000€, que es la cantidad, que junto con Torrellano, compartimos en los presupuestos participativos.

Y nada más. O sea, un 6’31% de la población del municipio, se han de conformar con el 1% de la inversión. (Siempre y cuando se ejecute).

A fecha de hoy, aún no se han ejecutado las propuestas aprobadas en el año 2016. Bien por falta de tiempo, bien por desinterés hacia las pedanías, o bien por falta de capacidad económica con la que afrontar dichos proyectos. Puesto que como todos sabemos, estas inversiones van directamente asociadas a la venta de suelo patrimonial, como se establece en las normas emanadas de aquel famoso artículo 135 de nuestra reformada constitución española, que firmaron entre los dos grandes partidos y sobre el que ahora echan la culpa de la falta de inversiones y de la falta de liquidez.

En este 2017 y a falta de concretar las propuestas elegidas, se han anticipado y nos han prometido varias inversiones, en concreto 5, y todas para El Altet. Se han anticipado, o precipitado, al anunciar el estudio de implantación de un nuevo centro socio cultural en El Altet, cuando en Arenales, con más de 2.000 habitantes ni siquiera pueden pasar consulta médica decente por falta de espacios donde hacerlo, ni salas donde poder reunirse, ni tan siquiera realizar talleres o cualesquiera otras actividades de animación o integración social, para una población, como la que allí reside, en su mayoría envejecida y sin posibilidad de desplazamiento. Y en Balsares ni siquiera facilitan que la cantina social pueda abrir sus puertas. En El Altet se dispone de dos centro sociales, pero en la mayoría de sus estancias se están realizando funciones de almacenamiento, dificultando las funciones establecidas. Para ello deberían plantearse antes de un nuevo proyecto de centro socio cultural, la reordenación de servicios y actividades que se realizan en los centros ya existentes. Devolviendo, por ejemplo, a la Societat Musical al edificio que antaño ocuparon, o implantando una escuela infantil municipal de 0 a 2 años, en el mismo edificio que quieren destinar a centro socio cultural, o en una estructura nueva si aquella no cumpliera con las garantías técnicas.

En cuanto a servicios, bien sean municipales o autonómicos, pues más de lo mismo. Seguimos como estábamos, pasa el tiempo y apenas se notan mejoras.

En seguridad, se ha aumentado el número de agentes destinados a nuestra zona, pero esto no se traduce en mayor visibilidad. Sabemos del envejecimiento del cuerpo de policía local y su paso a otras actividades, y las dificultades que ello provoca a la hora de confeccionar las plantillas que puedan dotar de mayor presencia en las calles y con ello el sentimiento de protección hacia la ciudadanía. Ciudadanía que reclama dicha seguridad, vital para su tranquilidad y normal desarrollo de sus actividades comerciales o lúdicas. Junto con la Policía Nacional realizan un enorme esfuerzo, pero todos somos conscientes del tamaño y singularidades de nuestro municipio, por lo que el apoyo de otros cuerpos, por ejemple, Guardia Civil, más acostumbrados a vigilar el entorno rural, podrían ayudar a mantener esa seguridad en las zonas más alejadas de la ciudad. Plantéenselo.

En limpieza seguimos sufriendo las consecuencias de un contrato no adaptado al momento actual que vivimos.

Mientras los núcleos urbanos y la población crecen, no se ha modernizado ni renovado la maquinaria que nos presta servicio día tras día, ni el personal abarca a la limpieza diaria requerida, no reuniendo los requisitos que en su día les hicieron lucir orgullosos la Escoba de Oro como ciudad más limpia de España. En este punto, no es que no se note mejoría, es que vamos hacia un abismo de suciedad, podredumbre y ruina. Y no hacen nada.

En materia sanitaria, y no siendo de su competencia, les pedimos que ejerzan de voz de nuestros vecinos y vecinas, ante las autoridades competentes, y no abandonen nuestras súplicas. Necesitamos asistencia sanitaria 24 horas y transporte sanitario ante cualquier imprevisto que surja a 15 kilómetros del hospital más cercano. Se puede, si se quiere, rediseñar el mapa de asistencia sanitaria y reorganizar los recursos para que todos los vecinos y vecinas del municipio tengan garantizado este servicio con la mayor celeridad posible.

En materia educativa, y como hemos dicho anteriormente, carecemos de escuela infantil 0 a 2, tenemos un colegio de infantil y primaria, con una población escolar sobredimensionada, lo que no facilita la labor docente ni dignifica la asistencia de nuestro niños y niñas a el espacio, que junto con sus hogares, van a hacer de ellos y ellas, las personas que serán en el futuro. Nuestros núcleos urbanos crecen y crecen, y con ello la población en edad escolar. Pero nuestro colegio es el mismo que hace 40 años. Algo falla. Y no empiecen por echarse la culpa unas administraciones a otras. Empiecen por ponerse de acuerdo y ver la realidad. Hace falta otro colegio. Y hace falta un instituto que de salida a toda esa masa escolar.

En cuanto a mantenimiento, vamos a hacer un punto y aparte.

Bien por falta de recursos, económicos y humanos, o bien por falta de interés real por las pedanías, ambas facetas son de fácil solución con un poco de voluntad política por su parte.

En un año, ni mejora de asfalto en las calles, ni mejora de aceras, ni señalización horizontal, ni señalización vertical, apenas 4 parches que no resuelven las enormes carencias en estos aspectos.

Pero no es esto lo más grave. Lo peor de todo, la falta de mantenimiento de edificios e instalaciones municipales, de todo tipo. Tanto escolares, deportivas o sociales. Edificios en su mayoría con muchos años desde su construcción y escaso su mantenimiento, lo que provoca graves deficiencias difíciles de reparar o rehabilitar.

Mención aparte, entre ellas, la piscina, cuya falta de mantenimiento y el poco aprecio hacia ella, además de su mal enfoque inicial, (privándonos de una piscina cubierta para todo el año), hace que el mayor atractivo que presenta, en su corto periodo de utilidad, sea salir vivo de ella .

Así que desde aquí, quisiéramos agradecer que dejen este espacio de participación a la ciudadanía, pero también que tomen nota de una petición: bajen a la tierra, pisen por donde pisan sus vecinos y vecinas, pónganse en su piel, dejen sus colores a un lado y mejoren su calidad de vida. A fin de cuenta, es su trabajo. Y si no son capaces, dejen que otros lo hagan.

Una sociedad organizada no necesita de gobernantes.