El Ministerio reconoce el esfuerzo de la UJI en la lucha contra el cambio climático
El sello, según explica el Ministerio, nace con una doble finalidad. Por un lado, facilita a las organizaciones demostrar su participación en el registro y, por otro lado, permite reflejar el grado de esfuerzo acometido por las mismas en la lucha contra el cambio climático.
La Universitat Jaume I avanza en las acciones de sostenibilidad del campus y lucha contra el cambio climático. El Ministerio para la Transición Ecológica ha resuelto positivamente la solicitud de la UJI de inscripción en el Registro de huella de carbono, compensación y proyectos de absorción de dióxido de carbono. Este registro, de carácter voluntario, acredita los esfuerzos de las empresas, administraciones y otras organizaciones en el cálculo y reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero que genera su actividad. A su vez, les facilita la posibilidad de compensar toda o parte de su huella de carbono, mediante una serie de proyectos forestales de ámbito estatal.
En línea con el compromiso institucional de promover el desarrollo sostenible y ser responsable con el medio ambiente, la UJI presentó al Ministerio el informe con el cálculo de emisiones de gases de efecto invernadero generadas por la Universitat. Esta calculadora permite estimar estas emisiones asociadas a sus actividades, contemplando tanto las emisiones directas (consumo de combustibles en edificios, fugas de gases refrigerantes fluorados en equipos de refrigeración/climatización y combustibles de vehículos propios), como las indirectas procedentes del consumo de electricidad.
Teniendo en cuenta que se debe establecer un año base histórico para la comparación de emisiones a través del tiempo, se ha seleccionado como año de referencia el 2021, siendo este significativo, ya que incluye las principales fuentes generadoras de emisiones en toda la institución. Según el informe presentado por la UJI al Ministerio, para este periodo de estudio la huella de carbono de la Universitat equivale a 1.399,944 toneladas de CO2, que, por el número de estudiantes del campus (13.102), supone una media de 0,1068 toneladas de CO2 equivalente por persona.
Por fuentes de emisión, la mayor porción de gases de efecto invernadero corresponde a la emitida por energía térmica (77,2%), seguida de las emisiones por gases fluorados (22,2%), la combustión móvil procedente de vehículos (0,38%), los grupos electrógenos (0,19%) y extintores (0,03%). El trabajo de cálculo de la huella de carbono se añadió en el contrato de Servicio de gestión de los suministros de electricidad y gas que tiene adjudicado la empresa Evolutiona y que supervisa la Oficina Técnica de Obras y Proyectos.
El vicerrector de Sostenibilidad e Infraestructuras, Vicent Cervera, ha destacado que la inscripción en el registro del Ministerio para la Transición Ecológica para calcular la huella de carbono «forma parte de los compromisos del Plan de acción por la sostenibilidad y contra el cambio climático de la UJI y se hace con la voluntad de poder reducir nuestras emisiones de efecto invernadero». En este sentido, una de las acciones ya adoptadas por parte de la Universitat para reducir su huella de carbono ha sido la contratación de energía eléctrica con garantía de origen, la cual certifica que la energía eléctrica suministrada y consumida proviene de fuentes renovables.