La Audiencia Provincial de Castellón, sienta esta mañana en el banquillo de los acusados, a un hombre por dos delitos continuados de abuso sexual a una menor. La víctima, hija de su pareja soportó tocamientos y besos a partir de 2017 cuando ésta tenía 12 años.
El acusado sometía a la niña a diferentes prácticas sexuales con el pretexto de que ese era un comportamiento normal entre padres e hijas. El hombre aprovechaba los momentos en los que la madre no se encontraba en la vivienda y se enfrenta a 18 años de prisión.