La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, se ha vuelto a rebelar contra una medida que aprueba el Gobierno. Esta vez se trata de una medida que forma parte del primer paquete del Plan de ahorro energético que establece que en los inmuebles de las administraciones públicas, así como establecimientos comerciales, el alumbrado de los escaparates tendrá que estar apagado desde las 22.00 horas.
Además, esta iniciativa se aplicará a los edificios públicos que estén desocupados en ese momento.
La presidenta regional cree que la medida de apagado de luces genera inseguridad y espanta el turismo y el consumo. Por ello, la presidenta ha asegurado que "Madrid no se apaga". Su gobierno no apagará la luz de los edificios públicos ni de los escaparates del comercio exterior.
Para la presidenta madrileña, la decisión del Ejecutivo de Pedro Sánchez "genera inseguridad y espanta el turismo y el consumo".
"Provoca oscuridad, pobreza, tristeza, mientras el Gobierno tapa la pregunta: ¿qué ahorro se va a aplicar a sí mismo?", ha lanzado la líder del Ejecutivo madrileño.