Los Mossos d'Esquadra y la Consellería de Educación ya no descartan ninguna hipótesis en el caso de las gemelas de Sallent que este martes se tiraron por el balcón desde un tercer piso. Si bien en las primeras horas no se contemplaba el bullying como indicio que hubiera llevado las hermanas a actuar de esta manera, ahora se ha decidido que la Unidad de Apoyo al Alumnado en situación de Violencia (USAV) se ponga en marcha para abordar el caso a fondo.
En este sentido, la directora general del Alumnado, Anna Chillida, ha sostenido que en casos de suicidio, los expertos y profesionales de salud mental remarcan que siempre son casos "multifactoriales" y por eso "requieren de los máximos recursos posibles y la indagación de la máxima información".
El centro no había detectado ninguna problemática específica relacionada con el acoso escolar, pero recibían atención psicológica y tenían un seguimiento especial por parte de una orientadora por su situación familiar y social. También estaban siendo atendidas por parte de los servicios sociales del Ayuntamiento. De hecho, una de ellas había sido derivada a los servicios de salud mental.
El caso está bajo investigación judicial. Ahora los Mossos centran las pesquisas en el entorno familiar y de amistades para determinar los motivos del suicidio y también estudian las redes sociales y los teléfonos móviles de las niñas.
Por otra parte, el Síndic de Greuges - el defensor del pueblo catalán - ha abierto una investigación de oficio. Ya ha requerido información al Departamento de Educación y al ayuntamiento de Sallent para saber si eren conocedores de algún tipo de acoso o si habían detectado malestar emocional y qué actuaciones habían emprendido.