Una condena unánime y firme. Eso ha recibido por parte de todos los grupos políticos de Valladolid el asesinato de la presidenta del PP de León, Isabel Carrasco, que ensombrecía el ambiente de la celebración del día del patrón de la ciudad. Así, las autoridades guardaban un minuto de silencio antes de la misa en honor a San Pedro Regalado y el alcalde, Javier León de la Riva, afirmaba que aún sigue conmocionado por una muerte sin sentido. "Nada personal puede solventarse tomándose cada uno la justicia por su mano", afirmaba el edil. Una opinión que compartía el secretario provincial de los socialistas, Javier Izquierdo, que hacía extensivo su pésame a todos los miembros del PP.