23 detenidos por presuntos amaños de partidos de fútbol en la Operación Conífera
La operación policial se ha llevado a cabo en cinco comunidades autónomas y en la Ciudad Autónoma de Ceuta.
La Policía Nacional, en una operación conjunta con Interpol y Europol, en el marco de la segunda fase de la Operación Conífera, ha detenido a 23 personas presuntamente incriminadas en el amaño de partidos de fútbol en el ámbito de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), la Liga Nacional de Gibraltar y la Liga de Andorra.
Los arrestos, entre los que se encuentran los miembros activos de la organización criminal, se han llevado a cabo en varias provincias --Badajoz, Cádiz, Ciudad Real, Córdoba, Tenerife y en la Ciudad Autónoma de Ceuta-- y se suman a las 21 detenciones que se realizaron en la primera fase de la operación.
Algunos de los arrestados vendían sus cuentas de juego para que los presuntos integrantes de la organización hicieran apuestas 'online' en partidos amañados, consiguiendo ingresos de entre 4.000 y 24.000 euros por cuenta de juego, según informa el Cuerpo Nacional de Policía.
La investigación se inició tras las detenciones y registros llevados a cabo tras la primera fase de la operación, en la que se detuvo a 21 personas en las provincias de Cádiz, Badajoz, Sevilla y Almería por presunta pertenencia a organización criminal, corrupción entre particulares en el ámbito deportivo y estafa a los operadores de juego.
El análisis de los datos permitió a los investigadores profundizar en el 'modus operandi' de la organización, identificando tanto a futbolistas que habrían participado en el amaño de partidos de fútbol como a personas que se encargaban de abrir cuentas de juego online y cuentas bancarias por las que circulaba el dinero de la organización. Este sistema de creaciones de cuentas y transferencias dificultaba la trazabilidad del capital y la vinculación de los investigados.
Información interna de los equipos
El 'modus operandi' de la organización criminal constaba de cuatro fases diferenciadas. Una primera etapa en la que el deportista facilitaba información interna de los equipos de fútbol, lo que aportaba a los integrantes de la organización y apostantes una ventaja competitiva en cuanto al conocimiento de las alineaciones de última hora, descartes, sistema de juego y otros aspectos no conocidos públicamente.
En la segunda fase se llevaba a cabo el concierto de amaños deportivos, creándose grupos de comunicación encriptados formados por los líderes de la organización y los deportistas para gestas los amaños y obtener grandes beneficios económicos.
Durante la tercera etapa, se llevaban a cabo las apuestas deportivas tanto de manera 'online' como presencial en casas de apuestas. Cuando las apuestas eran tramitadas vía 'online' utilizaban identidades diferentes para evitar la interrelación entre los miembros del entramado criminal y cuando se hacían de manera presencial, se ejecutaban las apuestas por pequeños importes para evitar que el cobro posterior del premio generase la emisión de certificados para la Hacienda Pública por parte de los salones de juegos.
Para finalizar las acciones fraudulentas, los líderes de la organización distribuían los beneficios generados durante las apuestas entre los deportistas implicados y el resto de la trama.
Fútbolistas, conseguidores de identidad y 'mulas'
La estructura de la organización estaba compuesta en un primer escalón por los líderes de la traba, dos personas que gestionaban las cuentas de juego online y las apuestas presencias. Un segundo peldaño de la trama lo formaban los jugadores de fútbol que aprovechaban su condición para organizar los amaños deportivos en los equipos bajo su influencia.
Otra parte de la organización era la formada por conseguidores y por 'mulas', los primeros aportaban identidades para operar en las apuestas 'online' y los segundos, encargados de acudir presencialmente a los locales de juego para realizar las apuestas fraudulentas y cobrar los premios obtenidos.
Fruto de la investigación desarrollada en las dos fases durante los años 2021 y 2022, se ha logrado la desarticulación total de la organización criminal dedicada a la realización de amaños deportivos en partidos de fútbol. En la primera fase se detuvo a 21 personas en las provincias de Almería, Badajoz, Cádiz y Sevilla, mientras que en la segunda fase se han practicado 23 detenciones. Los investigadores estiman que le montante total estafado podría ser superior a los 500.000 euros.
Para el esclarecimiento de los hechos y la desarticulación del entramado criminal, se ha contado con la colaboración de Europol, Interpol, del Servicio de Investigación Global del Mercado de Apuestas (Sigma) dependiente de la Dirección General de Ordenación del Juego, de la Unidad Anti Amaños de la UEFA, así como de La Liga y de la Real Federación Española de Fútbol. Se investigan más de 30 partidos en competiciones deportivas y la investigación continúa abierta.