Ciudad Real | 08.04.2019 14:38 (Publicado 08.04.2019 06:00)
Las diferentes partes han elevado a definitivas sus conclusiones y han mantenido sus posturas iniciales.
El Ministerio Fiscal asegura que el acusado cometió un delito de asesinato, otro contra la seguridad vial y uno más por negarse a pasar el control de alcoholemia y drogas, por lo que solicita 20 años de cárcel.
La fiscal considera que tras una discusión en un bar entre el padre y el hijo, este cogió su coche y arroyó a su progenitor en la calle.
La fiscalía duda que el acusado tuviera intención de pedir auxilio cuando volvió al bar, una vez atropelló a la víctima, y afirma que quiso matar sobre seguro a su padre.
La acusación particular, por su parte, considera que el procesado cometió un delito de imprudencia temeraria.
También asegura que pudo cometer un delito de omisión del deber de socorro, por lo que pide entre año y medio y dos años de prisión.
El abogado de la defensa también niega que su cliente cometiera un asesinato, y sí un delito de imprudencia temeraria, como asegura la acusación particular. Solicita como máximo un año de prisión.
Asegura que hay muchas dudas de que el acusado cometiera un asesinato, y reconoce que en el momento de los hechos iba borracho y había consumido drogas.
La Magistrada que preside el juicio entregará esta tarde al jurado popular, compuesto por nueve personas, el escrito del veredicto. Después, el jurado se reunirá para comenzar a deliberar sobre la culpabilidad o no del acusado.