El comercio minorista generó en 2013 un volumen de negocio de 4.430 millones de euros, el mayor desde 2008, según Pimeco
Se han destruido 1.906 comercios minoristas en Baleares desde que empezó la crisis.
El comercio minorista generó en 2013 un volumen de negocio de 4.430 millones de euros, lo que supone una cifra de 208 millones más que en 2012 y haber generado el mayor volumen de negocio de los últimos años, siendo superado tan sólo por 2008, según los datos recogidos por la Patronal del Pequeño y Mediano Comercio de Mallorca (Pimeco).
Según se extrae de su informe de 2013, que ha sido presentado este lunes en rueda de prensa, tanto en el caso de Baleares como en el de Mallorca, 2013 es el primer año de la crisis económica en el que el comercio minorista ha vendido "más que en el año precedente".
A pesar de esto, destacan en el informe, la mejora del volumen de negocio del comercio autonómico e insular sigue situando al comercio "muy por debajo de los valores de antes de la crisis económica". Si en el pasado año el comercio generó un volumen de negocio de 4.430 millones, en 2009 generó 4.417 millones pero, cabe resaltar que sigue alejado de "los más de 4.600 millones de euros que se superaban en los años pre crisis".
Respecto a Mallorca, se generó en 2013 un volumen de negocio de 3.410 millones de euros, 159 millones más que en el año anterior. Este dato, destacan desde Pimeco, se sitúa "muy por debajo" del volumen de negocio del 2008 (3.771 millones ese año) y del 2007, donde se alcanzó un volumen de 3.867 millones.
En otro sentido, destacan desde la Patronal que desde que empezó la crisis y hasta el 1 de enero de 2013, se han destruido 1.906 comercios minoristas en Baleares, lo que supone el 14,5 por ciento de la planta comercial. Así, el comercio de reparación y venta de vehículos ha descendido un 6 por ciento, y el de al por mayor un 5,6 por ciento.
Así, en este ámbito, el informe destaca que del 1 de enero de 2010 al 1 de enero de 2013 han cerrado un total de 914 locales del comercio minorista en Baleares. De estos, un 78 por ciento no contaban con asalariados o tenían de uno a dos empleados.