En rueda de prensa tras reunirse con representantes de Aloneco, Acotur, la Asociación de Comercios y Empresas de Servicios Turísticos de Mallorca, la Asociación Hotelera de la Playa de Palma y la Plataforma de Vecinos de la zona, Gijón ha resaltado que el documento presentado este lunes deja claro que no habrá expropiaciones en la Playa de Palma.
El nuevo plan contempla la conversión de más de 75 hectáreas en suelo rústico, la mejora del entorno paisajístico, facilidades a los hoteleros para que inviertan en reformas, no aumentar las plazas en estos establecimientos y, además, "pone en valor lo que existe, que ya es muy bueno", ha remarcado Gijón.
Sobre las licencias, Gijón ha explicado que se dará "agilidad y rapidez" a las reformas que quieran llevar a cabo los inversores de cara a la próxima temporada. No obstante, ha destacado que durante el periodo de alegaciones se suspenderá la tramitación de las mismas.
Todo ello tiene como objetivo que "los hoteles de una y dos estrellas vayan despareciendo en favor de los de tres, cuatro y cinco estrellas" para que Playa de Palma siga siendo "una zona turística de primer nivel y no sea una zona residencial", ha subrayado Gijón.